"La expulsión acelerada”


Agencias / Cortesía | 2/29/2024, midnight
"La expulsión acelerada”
El uso agresivo podría obligar a las personas solicitantes de asilo a defender sus casos en pocos días, desde la austera custodia de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos y sin un acceso significativo a un abogado. |

El presidente Joe Biden está analizando una acción ejecutiva que podría impedir que las personas que cruzan de manera ilegal a Estados Unidos soliciten asilo, dijeron varias personas con conocimiento de la propuesta. La medida suspendería las garantías que desde hace tiempo otorgan el derecho a pedir refugio a quien pise suelo estadounidense.

La orden pondría en vigor una política clave de un proyecto de ley bipartidista que los republicanos frustraron a principios de este mes, a pesar de que contenía algunas de las restricciones de seguridad fronteriza más importantes que el Congreso haya contemplado en años.

En esencia, el proyecto de ley habría cerrado la frontera a los recién llegados si un promedio de 5000 migrantes al día intentara cruzar de manera ilegal en el transcurso de una semana, o más de 8500 en un día determinado. La medida que está estudiando la Casa Blanca tendría un efecto similar y bloquearía el asilo a los recién llegados.

La medida, de promulgarse, recordaría a un intento del presidente Donald Trump de frenar la migración en 2018, que fue atacado por los demócratas y bloqueado por las cortes federales.

Aunque una acción de este tipo se enfrentaría a desafíos legales, el hecho de que Biden lo esté considerando muestra hasta qué punto ha cambiado de opinión sobre la migración desde que llegó al cargo, prometiendo un sistema más humano tras la gestión de Trump.

Biden ha adoptado una postura mucho más severa a medida que el número de personas que cruzan la frontera entre EE. UU. y México ha alcanzado niveles récord y el sistema de asilo, que está insuficientemente financiado y padece una falta de personal crónica, llega a un punto de ruptura.

Sin embargo, aunque Biden intentara tomar medidas unilaterales para reducir el número de personas que solicitan asilo, la falta de recursos seguiría siendo un enorme obstáculo para cualquier cambio importante en la frontera. Los funcionarios estadounidenses han dicho que necesitan una inyección

El gobierno de Biden lleva varios años tratando de frenar la migración, en parte limitando el asilo a quien cruza México de camino a Estados Unidos. Esa política hacía más difícil que los migrantes obtuvieran asilo si cruzaban por un tercer país en su ruta hacia Estados Unidos y no solicitaban protección allí.

EL DATO

Biden podría citar su autoridad para actuar en virtud de la Sección 212(f) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad de 1952, que permite que el presidente suspenda la migración de cualquier persona que se determine que es “perjudicial para los intereses de Estados Unidos”.