Según los dermatólogos, conviene lavar la ropa sin estrenar antes de usarla. El principal motivo reside en que desde que se fabrica hasta que llega a nuestras manos la ropa pasa por muchos lugares y personas, por lo que acumula bacterias, polvo y suciedad, además de los tintes y productos químicos inherentes a la prenda.

La ropa que debe lavarse sí o sí es la que estará en contacto con la piel de manera directa: la ropa interior, la de baño, camisetas, pantalones, vestidos, camisas; y con mayor cuidado, la ropa de los bebes.

En el caso de las mujeres, el lavado previo al uso de la ropa interior evitaría problemas ginecológicos como inflamaciones de tipo bacteriana o micótica como la vulvitis. En el caso de la chamarra, chaqueta, del suéter o del jersey, no necesitan de un lavado previo al uso tras la compra.

EL DATO

En las personas con piel sensible, las principales consecuencias de usar ropa nueva y sin lavar van desde una dermatitis alérgica o irritativa hasta eritema (enrojecimiento de la piel), descamaciones, lesiones de contenido líquido tipo vesículas o prurito.