Hablando de conciertos, ¿tienen anécdotas divertidas?

Hemos tenido caídas, se ha ido la energía eléctrica en pleno concierto, al principio todas estas cosas resultan ser una molestias para nosotros, pero al final del concierto lo que hacemos es reírnos de todas estas situaciones. Al final, estas experiencias enriquecen nuestra carrera y nos conectan más con nuestro público.

¿Es cierto que te gusta la cocina?

¡Me encanta! Cuando estoy en casa trato de cocinar lo más que puedo y de todo un poco. Lo único que no como es pollo. Es tanta mi pasión por la cocina que hemos abierto restaurantes en Miami y Venezuela.

¿A qué le tienes miedo?

En algún momento le tuve miedo a la muerte, pero creo que ese miedo se ha ido diluyendo, ya que me siento agradecido por todo lo que he vivido. Me preocupa un poco no estar en los momentos más importantes de mis hijos, pero a su corta edad ellos han recibido tanto amor de sus padres que los puede ayudar a prepararse para afrontar la vida con valentía.

¿Por qué decidieron grabar un disco infantil?

Fue un proyecto que inicié hace mucho tiempo con la ayuda de un muchacho llamado Carlos Escalona, un latino que ha hecho cosas muy importantes en el mercado musical en New York. Se lo mostramos a la empresa, ellos quedaron encantados y decidimos sacarlo al mercado. Está disponible en formato digital en todo el mundo.

¿Cómo ves la situación del racismo e inmigración en este país?

Nunca había estado tan preocupado; sé que hay mucha gente que es racista, pero se contenían en demostrarlo. Estos actos de xenofobia y racismo son como una enfermedad, estas personas no están bien. Pero ahora un candidato presidencial fomenta el odio y alientas a estas personas a expresar su odio. Ellos deben reconocer que los inmigrantes fomentamos empleos en el país, ayudamos a las comunidades donde vivimos, ayudamos al crecimiento de la economía y no somos delincuentes. Somos gente de familia y paz.