Cuatro personas aspiran convertirse en el nuevo Sheriff del Condado Travis y uno de ellos es John Sisson, abogado criminal con 37 años de experiencia en las fuerzas de seguridad.

Se trata de un hombre que fue parte del Departamento de Policía de Austin, ocupando cargos de oficial y teniente, para luego trabajar con la oficina del Alguacil como sargento. Además fue oficinal correccional en las cárceles del condado.

Pero también se trata de un hombre que, de joven, vivió los abusos de un padre alcohólico. Su primera muestra de valentía fue durante su adolescencia, cuando se interpuso entre su padre y su madre para evitar que éste la siguiera maltratando. “Desde ese día supe que quería ayudar a más personas, que sí es posible evitar la violencia. Tengo compasión por la gente y creo que eso es lo que me hace realmente diferente a cualquier otro candidato. Quiero recuperar la confianza de la comunidad”.

Al hablar de seguridad en el condado John sabe que todos los candidatos a Sheriff prometen incrementar el número de oficiales de policía en las calles, cosa en la que él también trabajará, pero no es su principal propuesta.

Sus propuestas abarcan temas más fuertes, como cambios importantes en las cárceles, uso de cámaras corporales y sacar a la Oficina de Detención y Deportación (ICE) de las cárceles del condado.

PINMIGRACIÓN

John Sisson ya está preparado para asumir el cargo de Sheriff y sabe que, de ser electo, un memorándum escrito será suficiente para que los funcionarios de ICE abandonen las oficinas que les ha prestado la Oficina del Sheriff desde hace más de cinco años.

¿Por qué? La respuesta es sencilla, una vez más habla de compasión. “La visión nacional de esta oficina es la que tiene los índices más altos de deportación y eso debe cambiar. ICE en nuestro condado está separando familias y arruinando vidas; eso debe terminar”.

Sisson sabe que muchos inmigrantes indocumentados, que llevan una vida honorable trabajando y sacando adelante a sus familias, tienen miedo de ser detenidos en las carreteras de Travis porque esto podría significar que ICE los identificará en las cárceles y comenzarán procesos para ser deportados.

“Nadie debería tener miedo de vivir en nuestro condado y mucho menos tenerle miedo a los oficiales de policía, porque lo que queremos es tener confianza. Sacar a los servicios de inmigración de nuestras cárceles es un primer paso y de verdad espero que, una vez que lo hagamos, esto sea un ejemplo para el resto de los condados de Texas”, dice.

Su propuesta es seguir colaborando con el ICE, pero reportando ante sus funcionarios sólo aquellas personas que realmente representen un peligro para la seguridad de la comunidad.

“Mi madre es inmigrante de Amsterdam y sé de cerca lo difícil que es para un inmigrante aprender un nuevo idioma y buscar un lugar en una sociedad totalmente diferente, trabajando duro para ofrecer una mejor vida a tu familia”.