Contribuye a que una persona luzca una mejor figura pero su beneficio va más allá de la apariencia: una faja puede ayudar a mejorar la postura, reducir los dolores de espalda o moldear la grasa del cuerpo, todo depende del objetivo de cada persona. Laura Espinoza, que está celebrando dos décadas dedicada a vender fajas a la medida en Austin –con envío a cualquier parte del país–, afirma que uno de los principales beneficios de usar una faja moldeadora es que mejora la autoestima y, con el uso constante, los cambios pueden ser permanentes.

Dueña de su propia marca –Laura’s Fajas– la empresaria modela sus productos y asegura que los resultados tienen que ver con la voluntad y el esfuerzo. Aunque Laura comenzó a usar fajas para aliviar dolores provocados por una hernia, su cuerpo se adaptó al ajuste, corrigió su postura y bajó de peso. “Las fajas son garantía de que se pueden lograr grandes cambios en el cuerpo”, afirma la empresaria originaria de México en conversación con El Mundo Newspaper.

Espinoza ofrece productos personalizados –según la necesidad específica del cliente– e incluye el mantenimiento de las fajas si el cliente tuvo alguna cirugía estética o plástica, o si se está recuperando de una cesárea o de alguna otra operación quirúrgica. “El mundo de las fajas ha crecido mucho, pero la mayoría tienen el mismo propósito, solo hay que elegir la faja correcta. Nosotros exportamos y usamos nuestras fajas, las conocemos, por eso sabemos cuál es la adecuada para nuestros clientes”, explica Espinoza.

La empresaria cuenta con un fabricante de fajas en Colombia, país donde encontró la mejor calidad de telas. Espinoza se distingue por la variedad de tamaños de sus productos, que pueden llegar hasta la 8XL –para quienes pesan hasta 400 libras–. Una ventaja adicional es la comodidad y la discreción de sus prendas.

Con precios desde los 75 hasta los 175 dólares –en el caso de fajas completas– o desde 50 dólares en alguna prenda individual de ropa interior, las personas que deseen comprar sus productos en su local ubicado en el 1022 Peyton Jane Road puede probarse los accesorios.

El local lo comparte con su hija Perla Espinoza, directora del estudio de belleza y maquillaje permanente, que ofrece tratamientos faciales y micropigmentación de cejas y pestañas. Perla ha sido la principal socia de Laura y ambas se complementan perfectamente: “Cuando una mujer entra al negocio de mi mamá interesada en una faja, también quiere ‘hacerse’ las cejas, un facial o las pestañas conmigo. Somos la combinación ideal”, comenta Perla y recuerda a la comunidad que tienen promociones todas las semanas.

EL DATO

Laura’s Fajas atiende de lunes a sábado, de 10am. a 7pm. Solicite información o programe una cita para el servicio de micropigmentación comunicándose al (512) 576-3657.