Son 13,480 mexicanos los que permanecen recluidos en las cárceles federales ubicadas en Texas, Arizona y California, según la Comisión de Sentencias. Se trata del 70.5% de la población de reclusos extranjeros que representa un gasto para los contribuyentes de este país. Los principales delitos por los que han sido puestos bajo custodia los presos mexicanos son: narcotráfico, violación de las leyes migratorias, fraude, lavado de dinero y portación ilegal de armas de fuego.