Si tus manos (o las de un ser querido) se ‘pelan’ con frecuencia y no conoces las razones, ponle atención a esto:

– La dermatitis. Quizá se deba a la presencia de hongos en el ambiente, en muchos casos, los animales son los portadores de este tipo de infecciones.

– La edad. A medida que nos hacemos mayores, nuestra piel va volviéndose cada vez más seca, con menos hidratación y esto reduce su elasticidad.

– Alimentación. Quizá sea consecuencia de algún tipo de deficiencia de nutrientes, especialmente de las vitaminas A, C y E.

– Problemas del hígado. Cuando este órgano funciona de forma irregular o presenta algún tipo de intoxicación, se dan síntomas externos como el desprendimiento de piel de las manos, erupciones cutáneas y salpullidos.