Cada vez más presos se suicidan en las cárceles


Agencias / Cortesía | 6/20/2019, midnight
Cada vez más presos se suicidan en las cárceles
AGOBIANTE. Los suicidios se han convertido en la principal causa de muertes en las cárceles del país. En 2014, cincuenta reos de cada cien mil se quitaron la vida. |

Los suicidios son la principal causa de muerte en las cárceles de este país: en el 2014, el último año con información oficial disponible, se registraron cincuenta muertes por cada cien mil reos. Esa cifra representa dos veces y media la tasa de suicidios en penales estatales y tres veces y media la de la población en general.

Este es un problema que se atribuye generalmente al hecho de que cada vez más personas con trastornos mentales terminan en prisiones, una tendencia que comenzó cuando se cerraron numerosos hospitales psiquiátricos estatales en la década de los setentas y no surgieron alternativas. Más recientemente, las cárceles se han llenado de adictos a opioides y metanfetaminas, muchos de los cuales sobrellevan depresiones y síntomas derivados de la abstinencia.

Esta creciente problemática ha planteado interrogantes en torno al trato de los reos con trastornos mentales en las 3,100 cárceles municipales del país, además de la posibilidad de que haya manejos negligentes y de que algunas de estas muertes hayan podido ser evitadas.

Una investigación de la Universidad de Maryland indicó que muchas prisiones han sido demandadas o están siendo investigadas bajo sospecha de negarles medicinas a los reos, ignorar pedidos de ayuda, de no supervisarlos debidamente o de imponer condiciones demasiado severas.

Estas demandas representan apenas una parte menor del problema. Un informe exclusivo del estado de cosas en cincuenta Estados de la Unión indicó que hubo más de trescientos suicidios en cárceles municipales entre el 2015 y 2017, tan solo en nueve Estados. Los otros Estados no suministraron la información o presentaron información incompleta.

EL DATO

Estadísticas del Gobierno Federal del 2014 señalan que hubo 372 suicidios ese año en las 3,000 cárceles estudiadas. Lo peor de todo esto, según abogados y defensores de los derechos civiles, es que estas muertes son mayormente evitables.