El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) firmó un acuerdo con 18 de los 254 condados de Texas para expandir un programa que permite a la policía local cooperar con las autoridades federales de Inmigración. El acuerdo es el inicio de una campaña nacional en contra de las ‘ciudades-santuario’ en todo el país.

Esta es la lista completa de las jurisdicciones que son parte del programa 287(g) en Texas: los condados de Aransas, Calhoun, Chambers, DeWitt, Galveston, Goliad, Jackson, Lavaca, Lubbock, Montgomery, Refugio, Smith, Tarrant, Walker, Waller, Wharton, Matagorda y Victoria; también el Departamento de Policía de Carrollton.

Con la adición de los 18 condados texanos, ICE tiene ahora 60 condados bajo el programa 287 (g), casi el doble del número de programas que estaban activos antes de que Donald Trump llegara al poder. Sin embargo otras jurisdicciones del estado se han mantenido al margen como el condado de Harris, el más poblado de Texas, que canceló el programa este año; y el Condado Travis, que se niega a hacer la labor de las autoridades federales.

El programa 287(g) ha estado en funcionamiento desde 1996 y permite que el Departamento de Seguridad Nacional establezca acuerdos formales por escrito con el Estado y los departamentos de policía locales para que sus oficiales puedan realizar algunas funciones propias de las autoridades federales de Inmigración.

El acuerdo en Texas se enfoca en el chequeo migratorio al interior de las cárceles; sin embargo un modelo del programa se ha usado en el pasado para permitir a los agentes que patrullan las calles que cotejen el estatus migratorio de las personas.

“Este programa ayuda a la seguridad pública porque reduce significativamente la probabilidad de que un extranjero removible sea liberado de nuevo en la comunidad”, señaló Thomas Homan director encargado de ICE, en la pasada convención de la Asociación de Sheriff de Texas.