En los próximos días empezarán a verse más state troopers en las calles de Austin. El Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) aportará policías estatales y agentes especiales para ayudar al Departamento de Policía de Austin (APD) a combatir el crimen y los asuntos de tránsito, así como ayuda para responder a otras situaciones de emergencia.

La colaboración entre el DPS y el APD fue anunciada por el alcalde de Austin, Kirk Watson, en conferencia de prensa junto con los jefes policiacos local y estatal, quienes aseguraron que los detalles del plan están en proceso, por lo que no hay detalle de la duración estimada del esfuerzo conjunto ni número de elementos estatales asignados. “Esta colaboración reducirá las muertes por accidentes de tráfico en Austin, reducirá el tiempo de respuesta de la Policía de Austin a las llamadas de auxilio al incrementar la presencia de las fuerzas de la ley en nuestra comunidad, lo que también contribuirá a desalentar y prevenir el crimen”, declaró Watson.

Este apoyo estatal acordado por el alcalde con el gobernador Greg Abbott y el teniente gobernador Dan Patrick permitirá enfrentar la falta de personal en APD mientras se reclutan más elementos y se reanudan las clases de entrenamiento suspendidas por cerca de un año debido a la pandemia.

Además de no contar con suficientes elementos en el APD, gerente interino de la Ciudad, Jesús Garza, refirió que la ciudad está enfrentando un aumento en accidentes de tránsito, en homicidios y en crímenes violentos. “Nos hemos movido rápidamente para atender asuntos de falta de personal: reclutando nuevos oficiales, reteniendo a los oficiales con experiencia, y aumentando el personal en nuestros centros de llamadas 911. Pero esos esfuerzos toman tiempo y no podemos esperar a que los vecinos se sientan seguros”, afirmó Garza.

El jefe de APD, Joseph Chacon, aseguró que el patrullaje de elementos del DPS por las calles y carreteras de Austin desmotivará a la delincuencia, además de hacer frente al aumento de accidentes de tránsito trágicos, así como episodios de violencia y crímenes con armas de fuego. “Queremos asegurarnos que estamos haciendo esto en la dirección correcta, así que nuestros esfuerzos serán orientados con datos y dirigidos con inteligencia, y nuestras unidades de análisis del crimen, tanto del APD como del DPS, trabajarán en conjunto para determinar estrategias de despliegue sensatas”, señaló.

El jefe Chacon ha reasignado estratégicamente el patrullaje de los policías locales, lo que ha implicado mover a los oficiales asignados al tráfico, vigilancia de parques, control del manejo en estado de ebriedad y otras unidades especializadas.

Chacon hizo referencia a la buena colaboración con el DPS, particularmente con la puesta en marcha de un grupo de trabajo conjunto para combatir las carreras de autos clandestinas y los bloqueos de calles registrados en febrero pasado, que ha llevado al arresto de varias personas.

Por su lado, Brian McGiverin, director ejecutivo del Austin Community Law Center –organización que ha participado en una coalición comunitaria para demandar una mayor vigilancia del APD–, consideró que está documentado que los policías responden más rápidamente a las alarmas de tiendas departamentales o almacenes –sin detener al presunto delincuente– que a llamadas de emergencia de la ciudadanía. “No creo que tengamos escasez de oficiales, creo que tendríamos que analizar muy detenidamente cómo estamos priorizando su tiempo antes de que saquemos esa conclusión”, afirmó McGiverin a El Mundo Newspaper.

EL DATO

El tiempo de respuesta de la Policía de Austin tras una llamada de la población se ha incrementado: de siete minutos en 2018 a diez minutos en 2022, según el Departamento de Policía de Austin. Por otro lado, se están haciendo esfuerzos para responder a las llamadas al 911 en un lapso de 15 segundos.

DEBE SABERLO

El Departamento de Seguridad Pública de Texas anteriormente ha desplegado elementos en otras ciudades del Estado para ayudar a combatir el crimen: a San Antonio en octubre del 2017; a Dallas en junio del 2019 en Dallas; y a Houston en diciembre del 2020.