Durante la pandemia, el Departamento de Agricultura relajó los requisitos de elegibilidad del Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP) para los estudiantes universitarios, permitiendo el ingreso de aquellos que reciben ayuda financiera sin el apoyo familiar esperado y de cualquier persona que califique para programas de trabajo y estudio simultáneos, independientemente de las horas trabajadas. Como resultado de esa apertura, se agregaron al programa hasta tres millones de estudiantes universitarios.

Sin embargo, con el fin de la emergencia de salud pública, los estudiantes que recibían los beneficios del SNAP tenían hasta el 30 de junio para volver a certificarse y permanecer en el programa. Por lo pronto, las reglas ampliadas ya no se aplicarán a los estudiantes de primer año de universidad este 2023. Decenas de miles de estudiantes universitarios podrían perder el acceso a este programa en los próximos dos meses.

La creciente conciencia del alcance del problema ha llevado a la creación de despensas de alimentos en los campus de cientos de universidades estadounidenses durante la última década, pero muchas de estas despensas, incluso en las principales universidades, se financian en su totalidad con donaciones, lo que limita su tamaño y escala.

Dado el horario irregular que a menudo define la vida de los estudiantes universitarios, algunas despensas en el campus han desarrollado modelos de servicio las 24 horas que no requieren la presencia constante de personal.

EL DATO

La elegibilidad ampliada de SNAP solo durará un año más. Todo el programa volverá a las reglas previas a la pandemia en diferentes momentos durante el año próximo.