Tres de cada cuatro personas (73%) en Texas tienen más dificultades ahora para comprar comida que hace un año; mientras que dos de cada cinco padres (40%) con niños en edad escolar experimentaron inseguridad alimentaria en los últimos 12 meses. Otro dato importante: Uno de cada tres encuestados con ingresos familiares anuales de entre 50,000 y 100,000 dólares reportaron inseguridad alimentaria, de acuerdo con una encuesta de No Kid Hungry Texas.

Esta situación, causada por la inflación y el aumento generalizado de precios, afecta a todos los habitantes sin importar su raza u origen étnico, pero también a quienes obtienen ingresos medianos. “Texas es uno de los Estados más grandes del país pero es también uno de los que tiene los números más alarmantes respecto del hambre infantil”, afirmó a El Mundo Newspaper, Franco Cruz, gerente de programas de No Kid Hungry Texas. Si antes de la pandemia la inseguridad alimentaria en los niños texanos era uno de cada siete, hoy es de uno en cada cinco niños. Y hay ciertos condados en el sur del Estado en donde uno de cada tres niños está en riesgo de pasar hambre, agrega Cruz.

La abrumadora mayoría (90%) de las personas en nuestro Estado está de acuerdo en que acabar con el hambre infantil es una prioridad para los funcionarios electos del Estado; mientras que el 95% dice que abordar el hambre infantil debe ser un tema bipartidista, según la encuesta. “La inseguridad alimentaria en estos momentos es tan extensa en este Estado que todos tenemos un vecino, un colega o un amigo que está luchando por alimentar a su familia”, asegura Cruz.

Otro hallazgo importante de la encuesta de NKHT fue que tres de cada cuatro padres (74%) expresó que su capacidad para comprar alimentos se afectaría si tuvieran un gasto inesperado (como una reparación de automóvil o una factura médica) de 1,500 dólares.

Esta primera medición para Texas comisionada por No Kid Hungry tuvo el objetivo de medir la situación de las familias en nuestro Estado sobre el impacto de la inflación y el término de los programas de ayuda financiera otorgados durante la pandemia. El Gobernador Abbott declaró que febrero fue el último mes para la extensión de beneficios de emergencia del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP).

“Estamos viendo números de inflación de los más altos en 40 años; muchas familias están batallando para llegar a fin de mes, así que cualquier reducción de los beneficios tendrá un impacto muy grande en la capacidad de las familias para poner alimentos en sus mesas”, alerta Cruz y agrega que existe un estigma respecto al hambre, lo que dificulta que una familia pida ayuda o solicite beneficios como SNAP o WIC, aunque tenga derecho a ella. En otro estudio realizado por NKHT encontraron que 46% de familias migrantes que requerían apoyo negaron buscarlo por temor a que les afectara en su proceso migratorio.

Cruz explica que han propuesto que el Estado garantice que los alimentos en las escuelas públicas sean gratuitos para todos los menores, pues existen algunos Distritos Escolares en el interior del Estado en los que las familias tienen que pagar por ello.

Es importante destacar que la Oficina de Sostenibilidad de la Ciudad de Austin y el Condado Travis trabajan en la construcción de un plan alimentario local para lo cual han seleccionado a 27 integrantes de un Comité Asesor Comunitario y a ocho embajadores comunitarios. Este comité seleccionará cuáles son los cuatro y/o seis problemas clave y las áreas temáticas del plan, los cuales se someterán a consideración de la ciudadanía en los próximos meses.

EL DATO

Aproximadamente 1.6 millones de familias y personas de bajos ingresos en el Estado reciben ayuda alimentaria mensual del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), que es un apoyo federal administrado por la Comisión de Salud y Servicios Humanos de Texas al cual se puede aplicar aquí: YourTexasBenefits.com

DEBE SABER

La Comisión de Salud y Servicios Humanos de Texas anunció que las personas beneficiarias de SNAP en los condados del Centro de Texas pueden solicitar la reposición de beneficios para alimentos perdidos o destruidos a causa de la reciente tormenta invernal. Esto aplica para asignaciones regulares y de emergencia de SNAP llamando antes del 28 de febrero al 2-1-1 y seleccionando la opción 2.