El Departamento del Tesoro impuso sanciones a dos miembros de la banda criminal internacional Mara Salvatrucha 13, acusándolos de estar involucrados en el tráfico de drogas y asesinatos en Centroamérica y Estados Unidos.

Las sanciones contra los dos individuos, un líder de la MS-13 en Honduras y un colaborador de la pandilla en Nicaragua, son parte de un esfuerzo más extendido del Gobierno Federal para bloquear las actividades y el financiamiento del grupo. Las sanciones contra la MS-13 tienen como objetivo interrumpir su uso del sistema financiero para evitar que laven sus ganancias ilícitas.

El líder en Honduras, Archaga Caria, ha distribuido cocaína desde ese país a Estados Unidos y ha ordenado el asesinato de pandilleros rivales. Caria, también conocido como ‘Porky’, escapó de una prisión en Honduras y está prófugo de las fuerzas del orden de ese país y Estados Unidos. El Porky es uno de los diez fugitivos más buscados por el FBI y la DEA. El Departamento del Tesoro ofrece una recompensa de hasta 5 millones de dólares por información que conduzca a su arresto o condena.

David Campbell Licona, colaborador de la MS-13, usó negocios que la pandilla poseía o controlaba para lavar las ganancias de las drogas, incluso a través de bancos estadounidenses. Actualmente está encarcelado en Nicaragua.

Washington intenta aumentar la presión sobre la MS-13. Las autoridades estadounidenses han acusado de terrorismo a los principales líderes de la MS-13, han pedido la pena de muerte para un líder que enfrenta cargos de asesinato y han presionado a El Salvador para que extradite a jefes de la agrupación.