El Gobernador Republicano Gregg Abbott, promulgó un paquete de leyes encaminadas a frenar la inmigración irregular. La nueva ley otorga el derecho –a cualquier policía de Texas– a detener a sospechosos de haber entrado ilegalmente en el país. Una vez bajo detención, podrían aceptar la orden de un juez del Estado para que abandonen el país o ser procesados por un delito menor de entrada ilegal. Los inmigrantes que no acaten la orden podrían ser detenidos y acusados de nuevo por delitos graves.

Además, la ley también concede 1,500 millones de dólares a la construcción del muro fronterizo en territorio texano. El objetivo de la ley SB4 es frenar la oleada de ingresos ilegales de personas a Texas, según el Gobernador Abbott.

Antes de promulgar la Ley SB4, el Gobernador Abbott enumeró los logros de su denominada ‘Operación Lone Star’, que dejó más de 489,500 detenciones de indocumentados; más de 37,500 detenciones de criminales; se incautaron más de 450 millones de dosis mortales de fentanilo y más de 80,000 migrantes fuero trasladados en autobús a ‘ciudades santuario’.

La legislación entrará en vigor el 5 de marzo y tipificará como nuevo delito estatal el ingreso o reingreso ilegal a Texas, con penas que van de 180 días de cárcel a 20 años de prisión.

EL DATO

Las fuerzas policiales de cada ciudad y de cada condado podrán arrestar a los inmigrantes que estén en territorio texano sin la documentación debida.