La gran mayoría (94%) de maestros en Texas sufre por los bajos salarios y escasos beneficios, la carga de trabajo excesiva y la escasez de personal; sin embargo, para mejorar sus condiciones laborales, la misma proporción de docentes pide que se les apoye con la disciplina estudiantil; se les dé autonomía como líderes del aula y tomen en cuenta sus opiniones al establecer las políticas escolares. Estos son algunos de los principales resultados de la Encuesta Maestros de Texas 2023, realizada por la Charles Butt Foundation y publicada en el informe “Listening to the Educator Experience”.

“La encuesta de este año, la cuarta consecutiva, deja en claro que los maestros todavía están luchando con los desafíos estructurales de la profesión; sin embargo, saben hacia dónde debe destinar el Estado los recursos y que necesitan apoyo administrativo y capacitación adicional”, afirma Shari Albright, presidenta de la Charles Butt Foundation.

Además de fortalecer la figura de la autoridad del maestro dentro del aula, los docentes también piden (93%) ser apoyados en sus interacciones con los padres de familia y con la comunidad; dotar a los planteles de seguridad, de suministros y de equipo adecuado (92%); así como gestionar la cantidad de tareas y las responsabilidades no educativas, además de proporcionar personal de apoyo adecuado (91%).

Otros hallazgos de la encuesta muestran que cuatro de cada cinco profesores sienten que tienen el apoyo adecuado de sus escuelas para generar un ambiente en el que los estudiantes pueden ser ellos mismos, sintiéndose empoderados para participar, además de tener una buena relación con otros estudiantes en el salón de clases.

En cuanto a su salud mental, el 83% de maestros la calificaron como ‘positiva’, aunque la encuesta encontró que ésta está asociada al entorno laboral del aula, pues la calificación positiva sobre este ámbito se redujo a 58% cuando se le relacionó con su trabajo docente. Además, un 91% consideró que la necesidad de apoyar la salud mental y el bienestar emocional de los estudiantes es una fuente de estrés personal.

Adicionalmente, cerca de tres de cuatro maestros sienten que tienen la habilidad de abogar en sus planteles por sus estudiantes que son de una raza o etnicidad diferente a la suya; por los que están aprendiendo el inglés; por aquellos que provienen de hogares de bajos recursos económicos o tienen diferencias en el aprendizaje.

La encuesta también encontró que el número de maestros que buscan dejar la profesión se mantiene por encima del 75%, aunque disminuyó 2% respecto del año anterior.

Audrey Boklage, vicepresidenta de aprendizaje e impacto de la Charles Butt Foundation, consideró que esta encuesta refleja verdaderamente la fuerza laboral docente actual en Texas al darle voz a los maestros. “Esperamos que otros vean esto como un llamado a la acción para escuchar y aprender de la experiencia del educador. Al escuchar sus voces, podemos comprender mejor sus necesidades y trabajar para crear un ambiente de mayor apoyo y empoderamiento para los educadores en todo Texas”, dijo Boklage.