Petición a favor de los trabajadores de la construcción
Agencias / Cortesía | 8/10/2023, midnight
Más de 130 organizaciones laborales y comunitarias a lo largo de Texas están solicitando al Gobernador Greg Abbott que establezca las protecciones estatales a favor de los trabajadores que laboran en condiciones climáticas extremas, como los de la industria de la construcción.
Cuando entre en vigor la ley HB 2127 –que eliminará la obligación que existe en Austin desde 2010 y en Dallas desde 2015 para dar descansos de diez minutos cada cuatro horas para que los trabajadores de la construcción puedan tomar agua y se protejan del sol– no existirá ninguna otra protección estatal o federal para quienes trabajen al aire libre.
En entrevista con El Mundo Newspaper, Christine Bolaños, directora de comunicación de Workers Defense Project, explicó que el crecimiento empresarial en Texas llegó acompañado de mayores exigencias de trabajo y –en el caso de la construcción– de jornadas más largas para acabar rápido con los proyectos.
Lo paradójico de esto es que la falta de protección para los trabajadores de la construcción puede resultar dañino para las empresas porque se registrarán más enfermedades, hospitalizaciones y muertes entre el personal, dadas las cálidas temperaturas diarias que están en los tres dígitos.
“Texas tiene una larga historia como Estado centrado en la promoción de empresas y negocios, por eso muchas grandes compañías eligen operar aquí. La capital texana, por ejemplo, ha crecido muy rápido en los últimos años; se ha convertido en centro de las industrias tecnológicas y de medicina debido a las condonaciones de impuestos y a otros incentivos. Eso viene acompañado de una presión de desarrollo y proyectos de construcción que aumentó en los últimos años”, señala Bolaños.
Un ejemplo de lo anterior fue la Tesla Giga Factory, que fue construida en tiempo récord y que implicó para los trabajadores una cierta cantidad de trabajo en un periodo muy corto. Sin la obligación de dar descanso a los trabajadores –que en agosto todavía está vigente en Austin– quedará a criterio de cada compañía otorgar esos descansos.
“He hablado con algunos de nuestros miembros, que son trabajadores de la construcción en Austin, y me dicen que han notado que actualmente los descansos obligatorios son aplicados por sus supervisores cuando están en los límites de la ciudad, pero tan pronto como es fuera de esos límites, porque muchos trabajadores tienen que trasladarse a Kyle o a Round Rock por ejemplo, sus supervisores pueden no optar por dar esos descansos porque no están obligados a hacerlo”, relató Bolaños.
Para registrar el nivel de necesidad de una protección legal y efectiva de quienes trabajan a la intemperie, Workers Defense Project compartió el testimonio de Eva Marroquín, trabajadora de la construcción en la capital y madre de cinco hijos que dependen de su salario: “Conozco de primera mano cómo los trabajadores, frecuentemente, sienten que ‘tienen’ que sufrir abusos en centro laboral, incluyendo el trabajar bajo temperaturas abrasadoras, para asegurarse de recibir su pago. Sé cómo los migrantes vulnerables y los trabajadores de habla hispana sufren de discriminación y abuso laboral”.
La Texas AFL-CIO, con apoyo de Workers Defense Project y Workers Defense Action Fund, compartió una petición en línea para solicitar al Gobernador Abbott su intervención para proteger a los trabajadores. Esta es: act.aflcio.org/letters/statewide-heat-protections “Los trabajadores en Texas están expuestos regularmente al calor extremo. En este tipo de condiciones de trabajo, las protecciones básicas, como los descansos, el equipo de protección, agua potable limpia y los primeros auxilios de emergencia, son disposiciones críticas para garantizar los lugares de trabajo seguros. Para una parte significativa de la fuerza laboral del Estado, estas protecciones siguen estando fuera de su alcance”, dice la petición.
EL DATO
Texas es considerado el Estado más peligroso del país para quienes trabajan en la construcción: aquí un trabajador muere cada tres días. Se estima que, al menos, seis de cada diez trabajadores en esa industria son hispanos.