El cerebro humano después de los 60 años
REDACCION EL MUNDO | 9/1/2022, midnight
Mi querida amiga Alexandra Malagón siempre me envía cosas sabias. La de hoy te ayudará mucho, al igual que me sucedió a mí.
A medida que envejezco, me siento más sabia, con un enfoque y compresión más profundos ante la vida y las cosas de cada día. Es como si todo lo estudiado por años, ahora lo pudiera aprovechar.
Mi marido, médico, siempre me habla de la vejez. Recuerda que nos llega de repente y muchas veces nos trae cosas difíciles (enfermedades, limitaciones, miedos…). Yo entendía lo que le pasaba. Es difícil no pensar así si se trabaja en cuidados intensivos, donde el ser humano casi siempre está entre la vida y la muerte. En medio de mi “negación” ante esa realidad, yo sonreía.
Hoy sé que no estaba tan equivocada, a pesar de él tener razón en muchas cosas. Mi enfoque era más completo. Hoy sé la causa, gracias a un estudio del “New England Journal of Medicine”.
El director de la Facultad de Medicina de la Universidad George Washington dice que el cerebro de una persona mayor es mucho más plástico de lo que se piensa. A los 60, el hemisferio derecho y el izquierdo tienen una integración más armoniosa, y es esto lo que realmente amplía la creatividad. No es tan rápido como en la juventud, pero gana a los cerebros de los jóvenes en flexibilidad.
Así, con la edad, tomamos decisiones correctas y tenemos menos emociones negativas. Por eso, a los 70 años, nuestro cerebro funciona con toda su fuerza.
La cantidad de mielina aumenta un 300%, facilitando así el paso rápido de las señales entre las neuronas. Después de los 60, la persona puede usar los dos hemisferios al mismo tiempo, y eso permite que resuelva problemas muchos más complejos.
El cerebro del hombre de edad elige el camino que gasta menos energía, saca lo innecesario y va directo a las opciones adecuadas para resolver el problema (profesor Mochi Uri, Universidad de Montreal).
Características del cerebro entre los 60 y los 80 años:
Las neuronas no mueren, las conexiones solo desaparecen si no se practica el trabajo mental.
La distracción y el olvido aparecen por la inmensa cantidad de información.
De los 60 en adelante, la persona no usa un hemisferio, sino ambos.
Lleva un estilo de vida saludable: muévete, baila, haz ejercicio, usa tu mente a lo máximo, ten plena actividad mental y verás que las habilidades intelectuales no se van con la edad, sino que crecen y tienen su etapa máxima a las 80-90 años.
No temas envejecer. Desarróllate intelectualmente, aprende idiomas, manualidades, música, viaja lo más que puedas, comunícate con tus amigos y haz planes para el futuro. Lo mejor de la vida está a la vuelta de una esquina. Toda edad tiene su encanto.
Así que, cuando alguien te diga “viejo”, míralo y sonríe. ¡Qué tonto es!