Luchan por corregir su identidad
Guillermo Zenizo | 10/13/2022, midnight
En Texas, el segundo Estado de la Unión con mayor población de personas transgénero –después de California– quienes no se identifican con el sexo biológico (con el que nacieron) enfrentan dificultades para hacer valer uno de sus derechos, que es clave para acceder a otros: el reconocimiento de su identidad. Solo una de cada cinco personas transgénero lo logra.
Este es uno de los principales hallazgos sobre la situación en Texas que dejó la Trans Survey 2015, la mayor encuesta en su tipo realizada en Estados Unidos, cuyos resultados fueron dados a conocer en un artículo académico escrito por Oralia Loza, profesora asociada de la Universidad de Texas en El Paso (UTEP).
Este diagnóstico será actualizado con la puesta en marcha de la encuesta U. S. Trans Survey 2022, que estará disponible del 19 de octubre y hasta el 21 de noviembre en la página ustranssurvey.org Pueden participar personas de todas las identidades transgénero, incluyendo binarias y no binarias, a partir de los 16 años. A diferencia de ediciones anteriores, esta encuesta podrá ser respondida en inglés y en español, ya que se busca que participen más personas migrantes e hispanas (documentadas o indocumentadas), entre otras minorías. La encuesta será anónima y solo requiere de sesenta minutos.
Para Loza, hay poca claridad legal en el tema, por lo que queda a criterio de cada juez permitirle a una persona la corrección de su género, lo que le dificulta a las personas transgénero obtener una identificación oficial que corresponda a su persona, y le impide acceder a otros derechos.
“Esto afecta muchos aspectos de sus vidas, pero teniendo una identificación válida con el género correcto se pueden evitar muchos problemas, especialmente ser discriminadas cuando están aplicando a un trabajo o cuando aplican a una vivienda”, señala a El Mundo Newspaper la investigadora del Departamento de Ciencias de la Salud Pública de UTEP.
Aunque algunas organizaciones civiles han estado trabajando con algunos condados, como Travis, para sensibilizar a los jueces sobre esta situación, otra dificultad del proceso está en la petición de múltiples documentos, incluyendo cartas de médicos, a pesar de que muchas personas trans no tienen acceso a servicios de salud; además de que estas correcciones legales también tienen consecuencias en la adquisición de un seguro médico, que cambia conforme al género y dificulta atender aspectos de afirmación de género.
Loza halló que, cuando se puede tener esa corrección legal de nombre y de género, las personas tienen menos probabilidades de sufrir acoso en lugares públicos y problemas de acceso a vivienda; además, son tratadas con mayor respeto por médicos y proveedores de salud, y se sienten más seguras de pedir ayuda a la Policía. “Esto (la falta de identidad) crea una situación muy difícil para que las personas puedan tener una vida estable, no solo financieramente, también social y en otros sentidos. Creo que ayudando a las personas transgénero en este proceso podrán superar varios retos que experimentan actualmente”, dice la académica.
Loza lamentó que, en lugar de que existan leyes que combatan la discriminación y faciliten este tipo de procesos a las personas transgénero, a fin de atender la realidad que se vive en Texas, ocurre lo contrario, pues la legislación estatal hace que las vidas de estas personas sean más difíciles por su escaso acceso a la atención de salud o cualquier aspecto que tenga que ver con su calidad de vida.
DEBE SABERLO
El Gobernador Greg Abbot y el fiscal general del Estado, Ken Paxton, han dispuesto que el Departamento de Familia y Servicios de Protección investigue a los padres de familia que proveen tratamiento de afirmación de género a sus hijos transgéneros por calificarlo de ‘abuso infantil’, lo que ha motivado que la medida sea combatida legalmente por diversas organizaciones civiles. Muchas de esas familias se mudaron a otros Estados.