Algunas medidas sencillas, como asegurarse de tener las ventanas y puertas bien cerradas, usar cortinas para disminuir la luz directa del sol y mantener la temperatura a 78 grados, permitirán que el recibo de electricidad no aumente tanto en verano.

Luis Rivas, especialista senior de Información Pública de Austin Energy, señaló a El Mundo Newspaper que esta serie de acciones pueden hacer una gran diferencia a la hora de evitar altos consumos durante altas temperaturas ambientales.

“En tiempos críticos, muy calurosos, empezamos a mandar mensajes en Twitter y Facebook a nuestros clientes sobre cómo conservar energía, consejos simples como, por ejemplo, el termostato en 78 grados, porque por cada grado que baje de esa temperatura puede subir hasta un 3% su factura mensual”, afirmó.

Otras recomendaciones es utilizar ventiladores, ponerlos en dirección hacia uno y que las aspas se muevan en sentido contrario a las manecillas del reloj pues, aunque no ayude a que baje la temperatura, da una sensación de frescura y hasta de cuatro grados menos.

“De las 5 a las 8pm si va a cocinar evitar usar el horno, porque el horno consume mucha electricidad y aparte emite calor; como calienta mucho el horno, ese calor se va al ambiente de la casa, y sí puede subir mucho la temperatura, entonces siempre recomendamos que usen el microondas, pues no mucha electricidad y no emite calor”, explicó Rivas.

Otra recomendación que la hace la compañía municipal es plantar árboles para dar sombra a las ventanas orientadas al sur y al oeste, pues los árboles pueden reducir la temperatura del aire interior hasta 20 grados, ahorrando hasta un 40% en costos de refrigeración.

Para quienes actualmente enfrentan dificultades económicas temporales, ya sea por alguna lesión seria, pérdida reciente de trabajo o alguna otra emergencia, Austin Energy provee financiamiento de emergencia para el pago de su factura de luz a través de sus programas de asistencia al consumidor (CAP), que actualmente beneficia a unas 45,000 personas.

La empresa pública está en proceso de actualizar su tarifa, lo cual no ha hecho desde 2013, con un aumento base general del 7.6%, dependiendo del tipo de cliente y de su uso de energía, que en un consumo promedio equivaldría a $15.56 más.

Si entre octubre y noviembre de este año es aprobada por el Concejo Municipal, la nueva tarifa entraría en vigor a partir de enero de 2023. El 18 de abril pasado se publicó la propuesta de tarifa base y se realizaron juntas comunitarias desde entonces hasta mayo.

La tarifa base cubre los costos de posesión y operación del sistema eléctrico, como las obligaciones financieras y los gastos de operación y mantenimiento de los servicios públicos, expone la compañía en su sitio web.

“El proceso de revisión incluye una revisión abierta y transparente de la propuesta de tarifa base de Austin Energy por parte de un examinador de audiencia imparcial con experiencia. El examinador escuchará todos los problemas y posiciones de los participantes y hará una recomendación sobre la propuesta de tarifa base de Austin Energy al Concejo Municipal de Austin”.

EL DATO

Si es aprobado por el Concejo Municipal de Austin, la tarifa de energía eléctrica podría incrementarse en 7.6% a partir de 2023, su primer aumento en una década.