En los primeros cinco meses de este año, cerca de veinte millones de estadounidenses renunciaron a sus empleos, un fenómeno social que fue bautizado como ‘La Gran Renuncia’. Sin embargo, la mayoría lamenta esa decisión, según un estudio de Joblist, plataforma de búsqueda de empleo.

El aumento en las renuncias se ha relacionado con los riesgos de contagio del COVID-19 en el lugar de trabajo; las nuevas oportunidades creadas por el trabajo remoto y la sensación general de que los estadounidenses han repensado sus vidas profesionales en medio de la agitación de una pandemia. Sin embargo, más de una cuarta parte de los que dejaron su trabajo consideran que la decisión fue incorrecta.

El estudio de Joblist encontró un rango de razones por las cuales la mayoría de los que renunciaron a sus trabajos preferirían no haberlo hecho. Muchos estadounidenses sienten ahora más urgencia por encontrar trabajo en medio de señales de que las condiciones del mercado laboral están a punto de cambiar.

Aproximadamente la mitad de los buscadores de empleo anticipan que el mercado laboral empeorará en los próximos seis meses. Además, entre los que encontraron un nuevo trabajo después de renunciar, un 42% dice que no cumplido con sus expectativas.

La conexión social a menudo se subestima cuando se toman decisiones de índole laboral, según el estudio. Muchos descubrieron que extrañaban a sus colegas. Muchas personas pasan tanto tiempo en el trabajo como con la familia y los amigos. Para aquellos que construyen relaciones personales sólidas con colegas, puede tener un gran impacto en la forma en que ven su trabajo y en la probabilidad de que permanezcan en él, dice Joblist.

El nivel de arrepentimiento varió según la profesión. Los trabajadores de la salud, sometidos a una inmensa presión por la pandemia, estaban entre los menos propensos a sentir que cometieron un error.

EL DATO

El nivel de renuncias laborales este año es aproximadamente el doble de lo que era hace una década.