Más de 5.5 millones de niños en este país han dado positivo al COVID-19, el 20% desde el inicio del presente año escolar, según la American Academy of Pediatrics.

Por lo general los niños son mucho menos susceptibles a enfermarse de gravedad o de morir, sin embargo, casi medio centenar perdió la vida desde el inicio de la pandemia. Las vacunas han estado disponibles para niños mayores de doce años desde mayo de este año, pero las tasas de vacunación infantil son mucho menores a las de los adultos.

Según datos oficiales, alrededor de la mitad de los jóvenes de 16 y 17 años están vacunados, y lo mismo sucede con el 43% de los jóvenes entre los 12 y 15 años. Entre los adultos, en cambio, están vacunados dos tercios de la población.

La atención médica infantil ha sido una enorme fuente de estrés durante la pandemia. Hay poco personal especializado y puede resultar difícil encontrar una plaza disponible en los centros de atención médica, en caso de emergencia. Se estima que para fines de año habrá una vacuna efectiva para los menores, mientras tanto siguen siendo vulnerables.

EL DATO

Más de un millón de estudiantes abandonaron el sistema de educación pública en el año escolar 2020. La mayoría ‘asistió’ a clases vía Internet.