Según la nueva política del Departamento de Seguridad Nacional para el trato a los inmigrantes, un extranjero no será detenido y deportado solo por ser indocumentado.

Los agentes migratorios deberán contemplar varios aspectos antes de procesar a un indocumentado, principalmente si ha cometido un delito o representa un peligro para la seguridad pública. Esta disposición la hará cumplir el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) desde el 29 de noviembre.

La Administración Biden anunció que priorizará la intervención de los inmigrantes que representen una amenaza real para la seguridad nacional, y en aquellos que entraron al país recientemente de forma ilegal.

EL DATO

Según un análisis del centro Transactional Records Access Clearinghouse (TRAC), más de 16,000 inmigrantes detenidos bajo custodia del ICE no tenían antecedentes penales.