El creciente número de indigentes en Austin sigue causando tensión entre el gobierno estatal y local. El Gobernador Greg Abbott ha criticado duramente la ordenanza municipal que permite que los indigentes puedan acampar en lugares públicos de la ciudad capital y recientemente lanzó una advertencia: Si las autoridades del municipio no resuelven el problema, Texas lo hará. “Nadie tiene derecho de orinar y defecar dónde quiera. La seguridad pública está en peligro”, decía parte del ‘tuit’ publicado el 20 de enero.

De inmediato, la organización local Save Austin Now anunció que ha recolectado más de treinta mil firmas para lograr que la opción de prohibir los campamentos de indigentes en las áreas públicas de Austin se incluya en la boleta electoral de mayo. Este es el segundo intento que hace esta agrupación para que la comunidad se pronuncie ante la problemática.

Por su lado, el Alcalde Steve Adler asegura que la respuesta al problema de la indigencia no es ocultarla. “No debemos mandarlos de regreso a los arroyos, no es seguro para ellos. Por lo menos ahora están seguros y pueden obtener servicios básicos. Regresar a cómo estábamos antes no es la respuesta, tenemos que trabajar para llegar a un plan que, en el largo plazo, sea efectivo”.

Una forma de encontrar la solución al problema es afrontar el problema de la falta de vivienda asequible.

Recientemente, las autoridades de la Ciudad de Austin anunciaron la posibilidad de comprar dos hoteles (el Candlewood Suites por $9.5 millones y el Texas Bungalows Hotel and Suites por $6.7 millones) que servirán como refugio para ciento cincuenta indigentes.

Por su lado, la organización Ending Community Homelessness Coalition (ECHO) y el Austin Justice Coalition (AJC) lanzaron la campaña How to House con la finalidad de que los dueños y administradores de propiedades que deseen participar ofrezcan viviendas a precios accesibles para que puedan ser ocupados por los indigentes. Cada negociación incluye acceso a los fondos de mitigación de riesgo, previsto para cubrir saldos pendientes o daños a la propiedad cuando expira el contrato de arrendamiento inicial. Desde diciembre, esta campaña a conseguido trece viviendas.

EL DATO

La ley requiere de dos mil firmas de los residentes de Austin para que la opción de restaurar la prohibición de campamentos en lugares públicos sea incluida en las boletas electorales de mayo. La Secretaría de Austin ya comenzó con la validación de las firmas presentadas por Save Austin Now. El viernes 12 de febrero se sabrá si las firmas presentadas fueron suficientes.