Sin ser autoridades ni parte de algún cuerpo policial, las milicias armadas son una fuerza intimidatoria que ha crecido con el apoyo abierto de Donald Trump. Estas facciones caminan con ametralladoras en mano, cascos de protección militar, entrenan maniobras de ataque en espacios abiertos y prometen una labor de vigilancia que nadie les ha encomendado.

Grupos paramilitares sin función oficial como Proud Boys, Oath Keepers, Three Percenters, entre otros, han proliferado a raíz de las masivas protestas registradas en los últimos meses en el país. Todas apoyan el discurso incendiario de Donald Trump.

Oath Keepers se formó en 2009 en Las Vegas (Nevada). Es una de las organizaciones radicales antigubernamentales más grandes del país, según el Instituto de Investigación y Educación en Derechos Humanos (SPLC). La mayoría de sus miembros son militares, veteranos y socorristas que justifican su presencia basándose en teorías conspirativas. Se dicen comprometidos en defender la Constitución contra todos los enemigos, extranjeros y nacionales.

Por su parte, Proud Boys es un grupo supremacista blanco que se autodefine como ‘fraternal’ y ‘libertario’ y niega ser racista. Otra característica es que sus miembros están en contra del islam, pero se consideran un grupo que no promueve la violencia.

Three Percenters es un movimiento miliciano que basa su nombre en una teoría inexacta, que asegura que solo el 3% de los estadounidenses luchó en la guerra de Independencia contra el ejército británico. De la misma forma en que los patriotas defendieron la Nación de la ‘tiranía’ impuesta por la monarquía europea, este grupo tiene como idea proteger a los estadounidenses del poder gubernamental, aunque apoyan firmemente a Donald Trump.

El objetivo de estos grupos armados, reconocidos por su tendencia ideológica de extrema derecha, es ‘defender’ la Constitución y mantener el orden. Sin embargo, para la organización de derechos civiles Southern Poverty Law Center (SPLC), se trata de grupos de odio que suelen organizarse en congregaciones pequeñas en sus localidades. Todos tienen presencia activa en las zonas rurales de los Estados de la Unión de tendencia Republicana.

EL DATO

Es absurdo y debería ser ilegal mostrar armamento en zonas residenciales.