Kevin McAleenan, secretario en funciones del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), advirtió que la Administración Trump pondrá fin a la política migratoria conocida como ‘catch and release’ (capturar y liberar) de las familias centroamericanas indocumentadas que crucen la frontera sur del país y las deportará a México o a sus lugares de origen. Las autoridades harán solo dos excepciones: por causas humanitarias y médicas.

El DHS tampoco liberará unidades familiares de las estaciones de la Patrulla Fronteriza en el interior del país. Las autoridades definen como ‘unidades familiares’ a individuos acompañados de un menor, un progenitor o un tutor legal.

Esta nueva disposición tiene el objetivo de mitigar los vacíos legales que actúan como un ‘factor de atracción’ para las familias indocumentadas que atraviesan la frontera. En la actualidad, decenas familias indocumentadas son puestas en libertad en territorio estadounidense luego de cruzar la frontera sur sin papeles y entregarse a las autoridades migratorias para solicitar asilo.

EL DATO

Si las familias inmigrantes no expresan temor a retornar serán devueltas rápidamente a su país de origen. Si manifiestan temor de retornar, serán enviadas a México según los Protocolos de Protección de Migrantes (PPM).