Después de meses de discusión, el futuro de los residentes de un tramo de la East Riverside estará en manos del Concejo de Austin. El jueves 17 de octubre votarán para aprobar o denegar el proyecto ‘4700 Riverside’, que los residentes del área conocen como ‘Domain on Riverside’, que consiste en el desarrollo de uso mixto del terreno que ahora ocupan los complejos de apartamentos Quad West, Quad East, Quad South, Town Lake y Ballpark North, en la intersección noreste ubicada entre la Riverside y la Pleasant Valley.

La propuesta comercial de las compañías de desarrollo inmobiliario Presidium Group y Nimes Capital es construir en el lugar: aproximadamente 4,709 unidades multifamiliares; alrededor de 600 cuartos de hotel; 4’000,000 pies cuadrados de oficina; cerca de 60,000 pies cuadrados de espacio de oficina médica-dental; y 435,000 pies cuadrados de espacio comercial en primera planta en las próximas décadas.

Considerando que la ‘4700 Riverside’ es un proyecto inmenso (ocuparía 97 hectáreas) surgió un conflicto de intereses entre dos posiciones discrepantes: por un lado, el concejal Sabino Pio Rentería del Distrito 3, que apoya el desarrollo de la zona; y la agrupación Defend Our Hoodz (Defiende Nuestros Barrios), a la que se han adherido decenas de vecinos.

El jueves 17 de octubre será un día de definiciones. Austin es una de las ciudades de más rápido crecimiento inmobiliario en el país y el proyecto ‘4700 Riverside’ es consecuencia de eso. Usted puede opinar, a favor o en contra, contactando al representante de su Distrito en el siguiente enlace: www.austintexas.gov/government.

Aprobar el proyecto depende del voto de Rentería, porque éste se desarrollaría en el Distrito que él representa. Sobre el desplazamiento de familias de escasos recursos económicos el concejal declaró el pasado 22 de agosto que ‘odiaba la idea’ de que eso suceda, pero también explicó que permitir la participación de las compañías de inversión asegurarían la creación de entre 200 y 334 unidades asequibles para familias pobres.

Por su lado, voceros de Defend Our Hoodz consideran que el único bienestar que traerá este proyecto será para los bolsillos de los inversionistas y para sus abogados. La razón de esta animosidad se debe al inminente desalojo de un millar de personas, entre estudiantes, inmigrantes y ciudadanos de escasos recursos económicos. El grupo adelantó que estará presente el día de la votación para hacer sentir su protesta.