Correr es una de las actividades deportivas que más contribuyen a nuestra salud física y mental. Practicarlo al menos treinta minutos diarios le dará a nuestro organismo grandes beneficios. Aquí las principales razones por las que deberíamos hacerlo:

– Reduce el estrés y ansiedad. Antes o después de iniciar tu jornada laboral o de estudios. Correr es el deporte perfecto para relajarte, pues refresca tus pensamientos y mantiene tu mente libre.

– Sube tu estado de ánimo. Al correr, el organismo produce una sustancia llamada endorfina (morfina endógena), la cual provoca que las personas estén de mejor ánimo. Este se verá reflejado en su productividad, ya sea en el trabajo o en los estudios.

– Mejora el ritmo cardíaco. Al ejercitarte, el cuerpo aumenta la frecuencia cardíaca, y de esta manera mejora la circulación sanguínea y reduce el riesgo de presión arterial alta. Asimismo, aumenta el colesterol “bueno”, lo que significa que se reduce el riesgo de ataque cardíaco, arteriopatía coronaria y embolias.

– Disminuye el riesgo de osteoporosis. Correr o trotar tienen un efecto positivo sobre la densidad mineral en los huesos. Si bien es cierto que estos sufren mayormente el estrés del ejercicio, finalmente son los que serán fortalecidos. En el caso de los corredores, las piernas y las caderas serían los huesos que aumentan su densidad.