La época de visitas frecuentes a la alberca está oficialmente inaugurada. Las vacaciones y las altas temperaturas son aliados perfectos para que muchas familias se reúnan a compartir momentos de relax en ríos, lagos y playas para, de paso, mitigar el calor texano con un refrescante chapuzón. Sin embargo, aunque el esparcimiento y el solaz son siempre propicios, las autoridades nos recuerdan que debemos tomar las precauciones necesarias para que la diversión no se convierta en una tragedia que pudo evitarse. Autoridades piden a los padres de familia evitar descuidos que puedan provocar una fatalidad en esta época del año.

Según un nuevo reporte de la U.S. Consumer Product Safety Commission (CPSC), basado en cifras de la USA Swimming Foundation, Texas lidera los casos de ahogamientos fatales de menores de quince años en todo el país, en lo que va del 2019. El año pasado (2018) Texas ocupó el segundo lugar, después de Florida.

“La razón principal por la que ocurren los accidentes fatales es por la falta de supervisión adecuada cuando los niños están en, o cerca de, una alberca. Para evitar que se ahoguen, los menores deben ser observados continuamente; no deben quedarse solos. Además, es muy importante que los niños aprendan a nadar para evitar estas desgracias. Eso es clave. Las vacaciones de verano son el mejor momento para inscribir a los pequeños a cursos de natación”, comenta para El Mundo Newspaper, Carla Coolman, portavoz de la CPSC.

Es oportuno destacar que en abril pasado se registró un total de 22 ahogamientos fatales de niños en albercas y spas en todo el país. Estas cifras representan un aumento de más del 90% en comparación con marzo, que registró dos ahogamientos infantiles.

Un hecho estadístico juega en contra de la comunidad latina: el 45% tiene poca o ninguna habilidad cuando se trata de nadar. “Los latinos son proporcionalmente más propensos a ser víctimas de un ahogamiento infantil. Los papás no cuentan con habilidades para nadar, lo cual es perjudicial cuando se trata de inculcar la necesidad de aprender a bracear y flotar”, advierte Coolman.

Recientemente, la CPSC lanzó una campaña nacional de educación pública conocida como ‘Alberca Segura’, que tiene el objetivo de reducir los ahogamientos infantiles, el hundimiento no fatal y los incidentes en albercas y spas. “El ahogamiento es rápido y silencioso, pero estas tragedias se pueden evitar tomando las medidas de seguridad adecuadas. Siempre les recordamos a los padres que si un menor se extravía, el primer lugar donde deben buscar es en la alberca”, concluye Coolman.

Recomendaciones

– Nunca deje a un niño desatendido en una alberca o en lugares donde haya agua acumulada.

– Designe a un persona que supervise a los niños en la alberca o spa. Esta persona no debe leer, usar el teléfono ni distraerse.

– Aprenda a nadar y enséñele a su hijo.

– Aprenda a realizar la Reanimación Cardiopulmonar (RCP) en niños y adultos.

– Mantenga a los niños alejados de los desagües de la alberca, de las tuberías y de cualquier hendidura para evitar que queden atrapados.

– Asegúrese de que cualquier alberca y/o spa tenga cubiertas de drenaje que cumplan con las normas de seguridad federales.

– Si tiene alberca en su casa, asegúrese de colocar alarmas que avisen cuando alguien entra o sale al patio; además, coloque una cerca en el área de la alberca y manténgala cerrada si no la usa.

EL DATO

Más información sobre cómo prevenir accidentes fatales en las albercas en www.poolsafely.gov/espanol

DEBE SABERLO

En los primeros cinco meses de este año se han ahogado en Texas once menores de quince años.