L os cargos de juicio político presentados contra el presidente Donald Trump son limitados: soborno y abuso de poder, pero de muchas consecuencias. La inminente votación hará que Trump forme parte de un club al que ningún presidente quiere unirse: sería el tercer mandatario estadounidense en enfrentar un proceso de juicio político por parte de la Cámara de Representantes.

Los representantes Demócratas alegan que Trump abusó de su cargo para obtener una ganancia política al pedirle al presidente de Ucrania que ayude a investigar al exvicepresidente Joe Biden, actual precandidato Demócrata a la presidencia y potencial rival en las elecciones del próximo año.

Además, los Demócratas acusan a Trump de obstruir las labores del Congreso de la Unión al bloquear el acceso a documentos y testimonios, un cargo de juicio político dirigido a reafirmar la autoridad de uno de los tres poderes del Estado. Algunos Demócratas querían ir más lejos, ansiosos por aprovechar la oportunidad hacer que Trump rinda cuentas por otras acciones, incluida la evidencia de obstrucción de justicia esbozada por la investigación sobre Rusia del fiscal especial Robert Mueller.

Sin embargo, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, se opuso, determinada a presentar sólo cargos que puedan obtener el apoyo de legisladores que, al igual que ella misma, estaban reacios a lanzar el proceso de juicio político. Ampliar los cargos habría puesto en riesgo el apoyo de algunos Demócratas, sobre todo de los representantes moderados que ganaron en Distritos donde Trump es popular.

La decisión de los Demócratas significa que Donald Trump enfrentará menos cargos de juicio político que cualquier otro de sus predecesores. Aún así, el futuro del presidente en el Senado de la Unión es mucho más favorable para sus intereses, ya que los Demócratas no han logrado persuadir a sus colegas Republicanos para que den la espalda al mandatario.

EL DATO

Ningún Republicano, ni en la Cámara de Representantes ni en el Senado, expresó su respaldo a los artículos de juicio político presentados por los Demócratas, incluidos los que abandonarán el Congreso el próximo año.