Las revisiones de antecedentes delictivos para quienes compran armas de fuego en este país se encaminan a cifras históricas. Según la industria, esto se debe a que hay consumidores que están comprando armamento en reacción a las exhortaciones de los precandidatos presidenciales Demócratas para esa adquisición esté sujeta a restricciones más estrictas.

La industria de las armas atraviesa uno de sus periodos más complicados, las ventas han caído notoriamente, por lo que algunos fabricantes de armas, como Remington Arms, se declararon en bancarrota. Y la empresa que controla Smith & Wesson, American Outdoor Brands, anunció que independizaría su unidad de armas de fuego, y Colt informó que suspendería la producción de sus fusiles AR-15.

EL DATO

Para finales de noviembre, el FBI había realizado más de 25.4 millones de revisiones de antecedentes delictivos, lo que perfila que el 2019 romperá el récord de 27.5 millones establecido en 2016.