Los bolivianos Marco Etcheverry y Jaime Moreno; el venezolano Josef Martínez; los colombianos Carlos Valderrama y Juan Pablo Ángel; los mexicanos Cuauhtémoc Blanco y Jorge Campos; el brasileño Kaká; el argentino Guillermo Barros Schelotto; el guatemalteco Carlos Ruiz; el hondureño Amado Guevara; y el salvadoreño Mauricio Cienfuegos, todos nombres ilustres de futbolistas latinos que marcaron época en sus selecciones y en la MLS.

El jugador latino, en general, ha tenido un impacto inmenso en la MLS. Desde los inicios de la Liga estadounidense en 1996, hasta la actualidad, los astros latinoamericanos han jugado un papel importante en el crecimiento del campeonato y en el éxito de sus clubes, gracias a su inmenso aporte, tanto dentro como fuera del rectángulo de juego.

No es casualidad que diez de los mejores jugadores de cada temporada han sido latinoamericanos, mientras que los récords de asistencias y goles en un curso de la MLS también los atesoran latinos: el colombiano Valderrama, el de los pases de gol, y el venezolano Martínez, el de las anotaciones. El jugador latinoamericano aporta carácter, pasión y gran nivel técnico a la MLS, elevando su calidad.

Para hacer frente a los deportes mayoritarios (football, baseball y basketball), los equipos de la MLS han apostado por atraer a jugadores de talla mundial que se encuentran en el ocaso de su carrera futbolística, como el inglés David Beckham o el español David Villa, entre otros. Sin embargo, otros talentos del fútbol, como los hermanos Dos Santos (Jonathan y Giovani), decidieron desembarcar en la MLS en el momento cumbre de sus carreras para competir con Los Ángeles Galaxy.

Más allá de la huella innegable de los futbolistas latinoamericanos en el desarrollo del ‘soccer’, en la MLS destaca también el crecimiento de los aficionados hispanos. Según estadísticas oficiales, la comunidad hispana representa el 30% del total de los seguidores de la MLS, un porcentaje que creció paulatinamente en las últimas dos décadas.

La comunidad latina tiene un papel muy importante para ayudar a que este juego crezca en un país donde el fútbol siempre ha sido un deporte secundario. Sin embargo, el peso del futuro del ‘soccer’ en este país recaerá en cómo y cuándo se forman las futuras generaciones; además, dependerá mucho de que la MLS siga invirtiendo como lo ha hecho en los últimos diez años.