La Administración de Seguridad del Transporte (TSA) anunció la expansión del uso de la tecnología biométrica a los principales aeropuertos del país con el objetivo de mejorar la revisión de los ciudadanos extranjeros. Y aunque esa es la prioridad, la agencia también anunció que ampliará el sistema a los vuelos domésticos en el mediano plazo.

Actualmente, la TSA y las aerolíneas asociadas verifican la identidad del viajero principalmente procesando datos biográficos e inspeccionando la identidad física y los documentos de viaje de cada individuo; pero el nuevo sistema biométrico simplificará la experiencia del pasajero y aumentará la eficacia de las revisiones y seguridad, ya que la CBP comparará imágenes faciales con fotos disponibles en las bases de datos gubernamentales (de pasaportes o solicitudes de visa) para verificar la identidad de cualquier persona, reduciendo así la dependencia de documentos físicos.