Según un informe del Buró Federal de Investigaciones (FBI), los delitos de odio en este país aumentaron un 17% el año pasado (2017), lo que supone el tercer año consecutivo de incremento. Más de la mitad de esos crímenes, aproximadamente tres de cada cinco, estuvieron motivados por cuestiones raciales o étnicas, mientras que uno de cada cinco fue por creencias religiosas.

De los 7,175 incidentes de esta índole que ocurrieron el año pasado; 2,013 fueron contra estadounidenses de raza negra; 938 contra judíos; y 1,130 contra homosexuales. Asimismo, los ataques antisemitas crecieron un 37% el año pasado.

Otra parte del informe del FBI registra que los delitos contra los musulmanes disminuyeron un 11%, con 273 incidentes reportados el año pasado.

En su recuento, el FBI también separa los delitos por tipología: más de 4,000 fueron contra personas y alrededor de 3,000 fueron crímenes contra la propiedad, desde vandalismo hasta robo e incendio.

EL DATO

Las autoridades federales documentaron 7,175 delitos de odio el 2017, en comparación con los 6,121 registrados en 2016. Al menos 4,895 agresores son mayores de 18 años. Y un 25% de 5,131 agresores es latino.