Raúl Vásquez conoció a la juez de paz Donna Thomson como a muchos clientes que se han hecho amigos suyos: ella visitaba su restaurante La Hacienda con frecuencia y era común entablar conversaciones amenas.

En el 2016, Vásquez le comentó que buscaba un lugar para mudarse y estaba pensando en comprar una propiedad para evitar más contratos de renta. Ella le ofreció de inmediato una casa de su propiedad en la calle Lamaloa Lane en Bastrop, por un monto total de 150 mil dólares.

Donna Thomson y Raúl Vásquez hicieron un trato de compra dueño-a-dueño, en el que ella lo financiaría. Él le entregó un pago inicial de 30 mil dólares y ella le hizo firmar dos contratos, uno de compra y uno de renta que establecía pagos de $1,300 al mes.

“Al pasar un año me dijo que tenía que darle el restante del dinero ya que ella me estaba financiando directamente. Luego puso un aviso de desalojo indicando que el contrato de renta había terminado. Yo soy un hombre de negocios, ella fue quien no cumplió con los términos de nuestro trato y su cargo no me iba a intimidar, así que llamé a mi abogado”, cuenta Vásquez quien tuvo que iniciar un proceso legal y llevar a la juez ante la Corte.

Bajo los términos del contrato de Thomson, la oficial esperaba quedarse con el dinero, pero el empresario hispano y su abogado, Jason Snell, no se quedaron de brazos cruzados. “Pensé que quizás, por su cargo, ella pensaba que podía abusar de su poder y de las personas; lamentablemente, mucha gente prefiere perderlo todo antes que ir a Corte, pero yo estaba dispuesto a demostrar que en este país las leyes aplican para todos por igual”, indica el conocido empresario.

Vásquez descubrió luego que otra persona había sido víctima de esta estafa de bienes raíces en la misma propiedad. Una maestra le contó como fue desalojada por Donna Thomson luego de haberle pagado 28 mil dólares como cuota inicial. Durante el juicio de fraude, también se descubrió que Thomson presentó la propiedad como ‘libre’ y lista para la venta directa, cuando ella aún tenía una hipoteca.

El pasado 2 de mayo, los miembros del jurado y la Corte declararon a Donna Thomson, juez de paz de Bastrop, como culpable de haber mentido y cometido fraude hipotecario.

El veredicto la obliga a pagar 750 mil dólares por daños; 57,300 dólares por violaciones a la práctica de compra-venta; 30 mil dólares por el pago inicial que Thomson intencionalmente tomó de Vásquez; 64,300 dólares por otros daños y 7 mil dólares por mejoras que Vásquez le hizo a la propiedad y gastos de representación legal. El total impuesto por la Corte es de 908,600 dólares.

“La decisión de la Corte y del jurado dejó claro que todos, incluso los funcionarios de alto poder, están sujetos a la ley. En adelante, otros lo pensarán dos veces antes de abusar de sus cargos y de su autoridad. Como dijo mi abogado, pueden ir a la Casa Blanca, pueden ir al Congreso de la Unión y cambiar las leyes, pero mientras ésta sea la ley, todos tienen que acatarla. Para mi siempre estuvo claro: no por ser hispanos nos van a pisotear”, finalizó Vásquez.

DEBE SABERLO

En enero pasado, Donna Thomson fue sentenciada a 15 días de cárcel cuando un juez descubrió que ella no devolvió armas de fuego a su ex esposo como se había acordado en el juicio de divorcio. En octubre del año pasado (2017) la oficial violó en tres ocasiones los términos del acuerdo firmado tras el divorcio. Actualmente, la juez está a la espera de audiencia por un caso en el que ella habría estrellado su vehículo contra un coche estacionado, abandonando el lugar, sin ubicar al dueño del vehículo para hacerse responsable por los daños. La jueza Thomson dice ser inocente.