Desde que Michael Jordan abandonó el baloncesto por el béisbol nunca hubo tanta conmoción en la NBA. Semanas después de ser pisoteado en los ‘playoffs’ por los Golden State Warriors, LeBron James, el cuatro veces MVP, anunció su traspaso de los Cleveland Cavaliers a Los Ángeles Lakers. No fue solo por dinero, sino por lo que significa reinar en una franquicia donde antes brillaron Kareem Abdul-Jabbar, ‘Magic’ Johnson y Kobe Bryant. El historial deportivo y el potencial económico de los púrpura y oro es insuperable.

El 3 de julio, un día después de que se confirmara la llegada de LeBron James al Staples Center, se generó un pedido de 60 mil camisetas de la nueva estrella de los Lakers, y la NBA empezó a discutir, en base a miles de peticiones, la posibilidad de cambiar el formato de conferencias solo para que en una probable final el ‘Rey’ se vuelva a encontrar con Stephen Curry y Kevin Durant, sus ‘ajusticiadores’ recientes. Además del jugoso contrato que podría convertirlo en el deportista mejor pagado del mundo, ‘Magic’ Johnson, presidente de los Lakers, le habría dado la potestad de elegir a sus compañeros.

Enonces se sumaron Rajon Rondo (New Orleans), Lance Stephenson (Indiana Pacers) y JaVale McGee (Golden State Warriors). Los dos primeros jugadores con mucha posesión de balón. Algo impensado en Cleveland, donde LeBron jugaba rodeado de lanzadores de triples que esperaban los designios del ‘Rey’ plantados afuera del perímetro. ¿El mismo LeBron quitándose protagonismo? Según los entendidos, próximo a los 34 años, LeBron sabe que para seguir reinando debe anotar más desde el poste bajo ante el natural desgaste de los años. Tal y como hicieron en su momento Michael Jordan y Kobe Bryant.

Pero sus ambiciones no son solo deportivas. Entre sus tantos negocios, LeBron posee SpringHill, una productora de cine y televisión que fundó con Maverick Carter, uno de sus amigos de infancia cuyas oficinas se encuentran en Los Ángeles. Su principal proyecto es filmar, bajo el sello de Warner Brothers, una versión renovada de Space Jam donde él reemplazará a Michael Jordan. Además, tiene planeado producir un documental para HBO sobre la vida de Mohamed Alí. No será tan difícil alternar su faceta hollywoodense al tener tan cerca a su productora.