Según un análisis realizado por el grupo activista Muslim Advocates, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) eliminó a más de 400 personas de los programas de ‘Viajeros de Confianza’ en enero del 2017, luego de la primera y más extrema versión de un veto migratorio del presidente Donald Trump dirigido a ciudadanos de siete naciones (mayoritariamente musulmanas).

Las acciones de la CBP respondieron al decreto presidencial que, inicialmente, sí incluía a los residentes permanentes de esos países, lo que causó la revocación de la inscripción de 432 personas. Como consecuencia, Muslim Advocates demandó al Departamento de Seguridad Nacional por los registros relacionados con las revocaciones.

La CBP dijo que todos los miembros afectados del programa ‘Viajero de Confianza’ han sido reintegrados. En tanto, el número promedio de revocaciones aumentó en 42% durante los siete meses posteriores al veto migratorio, según documentos de la CBP. Hubo un promedio de 169 revocaciones por semana durante los cuatro meses anteriores a la emisión del decreto presidencial, pero para agosto de 2017, en plena Administración Trump, el número alcanzaba 240 por semana. Los datos también muestran un aumento en las revocaciones semanales promedio para personas de todas las naciones mayoritariamente musulmanas incluidas en el veto inicial, según el análisis de la organización. Cómo funciona el programa Para inscribirse en Global Entry, uno de los cuatro programas federales, los postulantes deben pagar 100 dólares, proporcionar información personal al Gobierno Federal y someterse a la toma de huellas dactilares. La persona también debe realizar una entrevista con la CBP. La agencia tiene varias excepciones para determinar si un postulante puede ingresar al programa, incluidas las condenas penales, las declaraciones falsas en la solicitud y una amplia categoría aplicable a los candidatos que ‘no pueden convencer a la CBP’ sobre su ‘estado de bajo riesgo’. No existen más detalles sobre los parámetros del prerrequisito final. La CBP no siempre entrega una razón de por qué se ha cambiado el estado de un viajero, pero se les permite contactar al mediador de la agencia para su revisión.