Las denuncias públicas de movimientos como el #MeToo y de las decenas de víctimas en el mediático juicio a Larry Nassar, exmédico terapeuta del equipo estadounidense de gimnasia, impulsaron en este país que aquellas mujeres que hayan sufrido de acoso, abuso y asalto sexual pierdan el miedo a contar sus historias y opten por denunciar a sus victimarios; a la par, la preocupación y la acción de las organizaciones civiles y de los entes gubernamentales también ha crecido.

En Texas, el Gobernador Greg Abbott, quien aspira a la reelección en ese cargo público, se ha sumado a la lucha contra los crímenes sexuales y anunció el plan ‘Prevenir, Proteger y Castigar’ con el que espera combatir no sólo el abuso y el asalto sino también el tráfico humano.

El plan fue anunciado a través de un comunicado de prensa de la Oficina del Gobernador. La misiva propone que la Unidad de Integridad Pública de los Texas Rangers reciba las denuncias y los reportes concernientes a este delicado asunto y se encargue de investigar profundamente los señalamientos.

Abbott también propone que durante la próxima sesión de la Legislatura se discutan nuevos proyectos de ley y se hagan las reformas necesarias que refuercen los castigos por crímenes sexuales, además de crear un registro que sirva para no contratar a los profesores que se involucren con sus estudiantes en relaciones inapropiadas.

La propuesta del Gobernador es contundente, ya que también propone la posibilidad de que un adulto que haya cometido asalto sexual o interacción inapropiada con un menor de edad no pueda subirse al mismo coche con un niño o niña que no sea su familiar.

Desde hace años, cientos de pruebas de asaltos sexuales y violaciones no han sido procesados en los laboratorios texanos por falta de presupuesto, por lo que el Gobernador propone financiar a las agencias de seguridad para que puedan procesar toda esta evidencia, comenzando con un fondo de 1 millón de dólares para el Texas Department of Public Safety (DPS).

¿Y las víctimas?

Si bien la propuesta de Abbott busca implementar castigos más fuertes y asentar las bases para mejores y más serias investigaciones, decenas de organizaciones civiles sin fines de lucro han expresado su preocupación por las víctimas y piden que el Gobernador abra su agenda y las incluya en este plan.

En muchos casos, por miedo a perder sus escuelas, manutención y hasta el hogar, algunas víctimas optan por no denunciar la agresión sexual, y para lograr combatir esta realidad, voceros de estas organizaciones creen que es necesario ofrecer apoyo y seguridad para quienes deciden hacer las denuncias. Ayuda psicológica, educativa y financiera serían imprescindibles en muchos casos.

La representante estatal Gina Hinojosa (D) está de acuerdo con las organizaciones civiles: “Me complace saber que la Oficina del Gobernador se está enfocando en el tema del abuso y el acoso sexual, pero el plan está incompleto. Aunque el Gobernador se enfoca en endurecer las leyes y los castigos, la gran necesidad está en los recursos con los que las víctimas de tráfico humano y crímenes sexuales realmente cuentan: si no apoyamos a las víctimas, éstas siguen siendo vulnerables”.

Hinojosa señala que muchas de las mujeres jóvenes y niñas que se convierten en presas de los traficantes humanos y de los abusadores no cuentan con estabilidad financiera ni tienen acceso a un sistema de apoyo emocional o de salud mental.

¿Por qué ahora?

El plan anunciado por el Gobernador Abbott no presenta ideas totalmente nuevas. El registro de maestros que han tenido relaciones inapropiadas con los estudiantes ya había sido propuesto por el representante estatal Tony Dale (R) durante la sesión legislativa del 2017. Ese proyecto de ley no logró el apoyo de las Cámaras debido a que suponía un costo de 1.8 billones de dólares y porque la mayoría Republicana argumentó que habían ‘otras prioridades’.

En cuanto a las víctimas, la representante Gina Hinojosa (D) propuso que el presupuesto estatal para el bienio 2018/2019 incluyera casi 3 millones de dólares para financiar un plan de acción de la Comisión de Salud y Servicios Humanos (HHSC), creada por la Legislatura para velar por las víctimas de tráfico humano y violencia doméstica, que no ha funcionado como debería por falta de presupuesto. “Aprobar esta propuesta nos habría permitido demostrar nuestro compromiso con las víctimas, pero tengo entendido que fue el mismo Gobernador quien objetó este plan y lo eliminó de la discusión del presupuesto”, señala Hinojosa.

Para muchos, el hecho de que todos los intentos legislativos previos en este sensible tema hayan sido desestimados por la mayoría Republicana en el Congreso de Texas, justifican las dudas e incrementan las suspicacias de quienes consideran que este delicado asunto es utilizado por el Gobernador para ganar la atención mediática y el apoyo de los votantes en los comicios de noviembre de este año.

Aunque la representante estatal Gina Hinojosa apoya cualquier medida que ayude a combatir los crímenes sexuales y el tráfico humano, considera preocupante que el Gobernador proponga a los Texas Rangers como ejecutores de la iniciativa. “Creo que la Legislatura debe hacer más en este tema. Sin embargo, cualquier plan de acción que involucre a los Texas Rangers debe establecer reglamentos y definir límites que eviten que el asunto sea utilizado con fines políticos.

LAS CIFRAS

$14 millones propone el Gobernador para financiar el procesamiento de evidencia de crímenes sexuales. $22 millones sería el presupuesto para crear un escuadrón contra el tráfico humano en la División de Investigación Criminal del estado. 302 investigaciones de abuso sexual y relaciones inapropiadas fueron abiertas en Texas durante el año escolar que culminó el 1 de septiembre del 2017. 433 denuncias de tráfico humano fueron reportadas en Texas durante el 2017.