Horizonte judicial sombrío del presidente
Agencias / Cortesía | 12/19/2018, midnight
‘Nadie ha hecho lo que yo hice’, repite cuando puede Donald Trump, un maestro en el arte de la autocomplacencia, quien asegura que Estados Unidos está mejor que nunca y que a él también le va bien. Sin embargo, al final de su segundo año en la presidencia, el balance general tiene muchos más contrastes, incluso cuando los indicadores económicos son buenos (por el momento).
Problemas adentro
El horizonte judicial del cuadragésimo quinto (45) presidente del país se ha oscurecido considerablemente. Su exjefe de campaña Paul Manafort está en prisión. Su exabogado Michael Cohen será encarcelado en pocos meses. Y la vasta investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre los supuestos vínculos entre Moscú y su equipo de campaña avanza rápidamente.
A medida que se desarrollan las investigaciones, los ataques de Trump contra el fiscal especial son cada vez más agresivos. Mueller, el hombre más secreto y discreto de Washington DC, no ha respondido nunca a los ataques presidenciales, pero su respuesta podría caer en 2019, a través de contundentes documentos judiciales.
conflictos afuera
Haciendo uso de fórmulas lapidarias, durante el 2018 el presidente Trump arremetió contra los dirigentes de los principales aliados de Estados Unidos como Theresa May (Reino Unido), Justin Trudeau (Canadá) o Emmanuel Macron (Francia), al tiempo que ensalzó sus buenas relaciones con Vladimir Putin (Rusia) y Kim Jong Un (Corea del Norte).
En el plano interior, ninguna reforma legislativa significativa ha sido adoptada desde la reducción de impuestos adoptada a finales del 2017. No se ha desbloqueado ni un dólar para el muro que Trump pide en la frontera con México y la victoria de los Demócratas en la Cámara de Representantes hará, y él lo sabe, que la segunda parte de su mandato sea infinitamente más difícil. a