El presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, y el presidente de la Asociación de Clubes Europeos (ECA) y de la Juventus de Turín, Andreas Agnelli, contemplan un plan para que la Champions League se juegue los fines de semana.

La idea es aumentar la audiencia televisiva en todo el mundo, ya que en algunos países la diferencia horaria hace difícil seguir los partidos programados los martes y miércoles. En China, por ejemplo, un mercado que la UEFA quiere conquistar en el corto plazo, los partidos de la Champions se transmiten desde las cuatro de la mañana.

La reforma horaria implicaría que las ligas nacionales deberían jugar con más frecuencia entre semana. El presidente de la ECA plantea una reducción del número de equipos que juegan las ligas europeas para facilitar la reforma.

EL DATO

Un aspecto de la reforma que planean la UEFA y la ECA afectaría la fase de grupos: Ya no habría ocho grupos de cuatro equipos, sino cuatro de ocho.