En 2015, los amantes del fútbol acogieron con alegría la participación de los Austin Aztex en una temporada de la United Soccer League (USL). Fue un ‘aperitivo’ necesario y esperado para una gran parte de sociedad.

Sin embargo, tras las inundaciones que sucedieron en mayo de ese año, el equipo perdió su estadio, en el céntrico House Park, y debió culminar la temporada en el Kelly Reeves Athletic Complex, que está ubicado en la West Palmer Lane al norte de Austin.

Encuentros amistosos de los equipos de la Liga MX y la actividad de clubes locales con participaciones exitosas en torneos estatales y nacionales afirmaron que la afición de Austin y del Centro de Texas era buen público para el fútbol. Específicamente para el fútbol de alta competencia. Hace unas semanas, se anunció que la emoción del balompié regresará a la ciudad capital con los Austin Bold, un equipo que jugará en la USL a partir del 2019. Pero mientras los fanáticos del fútbol celebraban la noticia, el mayor deseo seguía siendo el que un equipo local compita en la Major League Soccer (MLS). Y parece que será así: el Concejo de la Ciudad de Austin aprobó iniciar las negociaciones con la empresa Precourt Sports Ventures (PSV) para la construcción de un estadio en McKalla Place, un terreno de 24 acres al norte de la ciudad.

“La Ciudad está emocionada con la Major League Soccer. Yo también lo estoy. No puedo esperar por el momento en el que todos usemos la misma camiseta”, ha dicho el alcalde Steve Adler respecto de la posibilidad de que llegue un equipo de la MLS a nuestra ciudad.

Las negociaciones con el Concejo de la Ciudad de Austin abren la posibilidad de que seamos parte del circuito profesional de fútbol de élite. Se espera que el equipo comience a jugar el próximo año (2019); sin embargo, deberán hacerlo en un estadio temporal, ya que la construcción de la nueva sede no culminaría hasta el 2021.

El Myers Stadium, ubicado en el dowtown, suena como una posibilidad, debido a que tiene la capacidad de albergar hasta 20 mil personas (la misma capacidad con la que contaría el estadio de McKalla Place). Otros rumores indican que la sede temporal estaría en Round Rock, pero hasta el cierre de esta edición nada estaba definido. La PSV está contra reloj si quiere reubicar a su equipo, mientras enfrenta demandas en Ohio que buscan obligarlo a vender el Crew para que el club se quede en su lugar de origen.

DEBE SABERLO

McKalla Place era un lugar para desechos tóxicos y la ciudad ha invertido cerca de $5 millones en limpieza del lugar que se convertirá en el estadio de un equipo de la MLS. Ni el House Park ni el Kelly Reeves cumplían con los requisitos de la Liga estadounidense.