El lupus es una rara enfermedad que afecta el sistema inmunológico y ataca a las células y tejidos sanos. Es crónica, por lo que puede durar toda la vida. Esta una enfermedad sistémica que afecta a muchos órganos y sistemas del cuerpo de causas auto-inmunes. Esto hace que nuestro propio organismo nos ataque de manera descontrolada. El lupus afecta usualmente a las mujeres. El 90% de los pacientes son de sexo femenino, jóvenes de entre 15 a 25 años. Sin embargo, niños y hombres también lo pueden padecer. El lupus daña partes importantes del cuerpo: las articulaciones, la piel; los riñones; el corazón, los pulmones, los vasos sanguíneos y el cerebro.

El lupus tiene diferentes síntomas. Entre los más comunes se encuentran: Artritis (dolor o inflamación de las articulaciones); dedos de las manos o de los pies pálidos o morados; caída del cabello; eritema malar (sarpullido enrojecido, más a menudo en zonas de la cara como pómulos); fiebre inexplicable; sensibilidad al sol; dolor de los músculos; hinchazón en las piernas o alrededor de los ojos; dolor de pecho al respirar profundamente; úlceras en la boca y cansancio. Diagnosticar esta enfermedad es complicado. No existe una prueba única para que un médico diagnostique esta enfermedad debido a que pueden pasar meses o años para que sea evidente. Sin embargo, el médico está en la obligación de sospecharlo si eres joven y mujer.