El impacto de ‘Harvey’ en la economía texana
REDACCION EL MUNDO | 9/21/2017, midnight
El sol volvió a salir en el Este de Texas y el recuento de los daños materiales ocasionados por el paso del huracán ‘Harvey’ continúa. Este fenómeno natural será recordado como una de las tormentas más destructivas de la historia estadounidense. Dada la magnitud de los daños, las repercusiones que tendrá ‘Harvey’ sobre la economía regional y nacional son decisivas.
Es importante tener presente que las pérdidas materiales provocadas por los desastres naturales se dividen en dos grupos. En el primero están las ocasionadas por la destrucción del acervo de capital físico: viviendas, propiedad comercial, maquinaria y equipo e infraestructura pública, así como la consecuente depreciación de los servicios y la reducción de los ingresos fiscales que éste capital genera. En el segundo grupo están las pérdidas ocasionadas por la interrupción total o parcial de la actividad económica. Considerando ambos elementos, las estimaciones preliminares de los especialistas sugieren que el costo bruto de ‘Harvey’ podría superar con creces los 60 mil millones de dólares.
Esa cifra convierte a ‘Harvey’ en el tercer fenómeno meteorológico más costoso para el país, sólo superado por los huracanes ‘Katrina’ (2005) y ‘Sandy’ (2012), cuyas pérdidas materiales rondaron un valor aproximado de 160 mil millones y 70 mil millones de dólares, respectivamente.
Además de los efectos regionales, la economía estadounidense también se vería afectada, aunque con un impacto reducido. Por ejemplo, no se esperan encarecimientos prolongados en la gasolina. Tampoco se pronostican que resurjan factores adversos para la economía a corto plazo. En cambio, los efectos para la industria bancaria se dejarán notar en lo que respecta a las tasas de morosidad, que podrían sufrir algún repunte, y también en el deterioro en la calidad de las garantías aportadas en las áreas afectadas. Los bancos de gran tamaño y diversificados deberían ser capaces de superar estos obstáculos con mayor facilidad. Por su parte, la actividad crediticia podría acelerarse a medida que las empresas y los consumidores participen en las tareas de reconstrucción.
En cualquier caso lo que parece evidente con las cifras preliminares es que las secuelas de ‘Harvey’ perdurarán por varios años. Texas y en particular Houston enfrentarán el desafío de mantener en pie su atractivo económico frente a la probabilidad de tormentas más frecuentes, y tanto o más destructivas que ‘Harvey’. Dicha probabilidad ha aumentado como resultado del cambio climático.
EL DATO
En ausencia de una estrategia de largo plazo, desastres naturales como el huracán ‘Harvey’ obligarían a la población a marcharse, además de disuadir tanto a la inversión como a las migraciones futuras, reduciendo con ello el potencial económico de la región