Poco después de que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) anunció la realización de más redadas en lugares de trabajo para capturar a indocumentados, una nueva advertencia prende las alarmas de la comunidad inmigrante: El ICE procesará penalmente no solo a los indocumentados durante estas redadas sino también a los a los empleadores que los contratan.

Danielle Bennett, portavoz de ICE, declaró al respecto: “Mientras nos enfocamos en la persecución penal de los empleadores que a sabiendas contratan a trabajadores indocumentados, en virtud de las prioridades de aplicación de la actual Administración, los trabajadores encontrados durante estas investigaciones que no están autorizados a permanecer en Estados Unidos también están sujetos a detención administrativa y la expulsión inmediata del país”.

La criminalización de los empleadores que contraten a indocumentados no es algo nuevo. La política fue aprobada en el 2009 por Barack Obama; sin embargo las cifras muestran que es bajo la Administración Trump que el enjuiciamiento de empleadores se ha disparado.

La semana pasada, Thomas Homan, director de ICE, anunció que su agencia aumentará de cuatro a cinco veces más el número de redadas a lugares de trabajo donde se conozca de la contratación de inmigrantes indocumentados. Estas operaciones buscan realizar ‘auditorías express’ de los formularios I-9 de los trabajadores, para saber si están legalmente en el país.

EL DATO

Del 9 de febrero del 2016 y hasta el 24 de junio del 2017, los agentes del ICE arrestaron a 42 gerentes y 55 personas sin cargo gerencial, por violaciones migratorias, y con la excepción de 15, todos fueron acusados y condenados bajo las nuevas reglas migratorias.