Entrevista al actor Roberto Manrique: “Lo que nos asusta, también nos atrae”
REDACCION EL MUNDO | 10/26/2017, midnight
El actor de ‘Sin Senos Sí Hay Paraíso’ revela que el altruismo le da sentido a su vida
Con 38 años, el actor ecuatoriano Roberto Manrique ha participado en más de dos docenas de telenovelas y series de televisión. Actualmente es parte de la popular producción ‘Sin Senos Sí Hay Paraíso’ de Telemundo, en la que interpreta a Santiago, el médico que le salva la vida a Catalina (Carmen Villalobos), para luego convertirse en su nuevo amor, esposo y padre de sus hijos.
Para Manrique, está ha sido una gran experiencia que además le ha dado la oportunidad de regresar a la televisión interpretando a un personaje que representa la redención de un hombre y la oportunidad de comenzar una nueva vida. En lo personal, explica Manrique, ser parte de esta producción le ha permitido compartir con otras reconocidas figuras de la televisión y espera que el impacto de ‘Sin Senos Sí Hay Paraíso’ le permita realizar futuros proyectos personales. Su personaje, sus proyectos y sus metas personales son parte de la conversación entre el galán de la televisión hispana y El Mundo Newspaper.
¿Cómo te sientes al ser parte de ‘Sin Senos Sí Hay Paraíso’?
La experiencia ha sido maravillosa. Yo soy como el nuevo en esta temporada y mis compañeros de trabajo son gente maravillosa que han hecho fácil que me integre al elenco. Me he reencontrado con gente muy talentosa y linda como Carolina Gaitán y Francisco Bolívar, con quienes ya había trabajado antes y he tenido la oportunidad de compartir con seres humanos como Carmen Villalobos y Fabián Ríos quienes hacen de ésta una experiencia grata y gozosa.
¿Qué es lo mejor de interpretar a Santiago?
Este personaje ha sido muy positivo porque representa la oportunidad de redimirse en el amor, sin importar que tan bajo has caído. Catalina cayó en la primera temporada, y con mucha humanidad, muy realista, vemos como a él le cuesta aceptar el pasado de ella, pero lucha por su amor.
¿Y qué es lo más difícil?
El mayor reto ha sido el acento, porque es la primera vez que interpreto a un personaje mexicano. La preparación fue muy interesante y hasta graciosa, hasta mi mamá imitaba el acento mexicano para ayudarme a acostumbrarme y no tener que trabajarlo demasiado frente a las cámaras. No soy de esas personas a quienes se les dan fácil los acentos, e interpretar a un personaje con otra nacionalidad significa un gran compromiso.
El narcotráfico se ha convertido en un tema recurrente en la TV. ¿A qué crees que se deba?
Esa no es pregunta fácil. Tenemos una tendencia al amarillismo como civilización. Aquello que nos asquea y escandaliza nos llama la atención. Lo que nos asusta, también nos atrae. El sueño del dinero fácil y el peligro forman parte del mundo del narcotráfico, que sabemos que no es correcto, pero hace que las protagonistas vivan en una línea delgada.
La mujer también asume un nuevo rol en la TV. Ahora vemos protagonistas con personajes más fuertes.
Esto responde al momento que está viviendo el mundo. Hace 20 años, producciones como ‘Betty La Fea’, con una protagonista distinta, pero exitosa, empoderada, era innovador. Este es un nuevo mundo, tenemos más presidentas mujeres, y la TV, el cine y el arte reflejan lo que somos como civilización. Sin embargo, cuando vemos las nuevas producciones, también vemos que todavía hay mucho trabajo por hacer, porque el machismo sigue siendo algo que debemos trabajar a profundidad.
¿Cómo escoges a tus personajes? ¿Hay alguno que te gustaría interpretar?
Lo que me gusta es el cambio constante. No me fijo en personajes pensando si es el bueno o el villano, los miro desde el punto de vista del reto, que sean diferentes a los que hice antes. Espero que mis próximos personajes también tengan ese elemento nuevo.
Esta serie es tu regreso a la televisión. ¿Te veremos en otra producción al culminar esta temporada?
Este proyecto es fenomenal porque tiene una gran proyección, por la cantidad de público al que llega y la pasión con la que es acogido. Después de un proyecto como este, la verdad es que pueden venir muchas bendiciones de muchos tipos. A mi me gusta dejarme sorprender, no pretendo saber qué pasará a mediados del próximo año, prefiero vivir el presente.
¿Tus proyectos inmediatos?
Estoy desarrollando la idea de mi segunda película, estoy trabajando en la producción de la segunda temporada de mi serie Web, ‘Bienaventurado’, que es un recorrido que hice en Ecuador sin dinero ni teléfono, durmiendo y comiendo como la gente común, que me ayudó siempre, y estoy trabajando en la fundación que creamos a partir del terremoto que remeció Ecuador el año pasado.
Mencionaste dos proyectos que fueron parte de tu tiempo alejado de la TV. Fue un ‘receso’ muy ocupado.
En los años alejado de la televisión exploré el mundo de la producción con mi primera película, ‘Translucido’, y la producción de mi serie Web, ‘Bienaventurado’, tocando temas que pueden hacer la diferencia y ese es un aporte que puedo dar como comunicador.
La gran exposición que me da esta serie me puede ayudar a atraer más audiencia para mis próximos proyectos y esa es la mayor bendición que me da la televisión.
Durante ese ‘receso’ también volviste al teatro.
El teatro es en vivo, cobra vida esa noche, esa función, en ese lugar y no importa cuánto intentes repetir la experiencia, cada noche es diferente y esa es la magia que tiene el teatro y que no tiene la televisión.
¿Qué te motivó a hacer ‘Bienaventurado’?
Siempre me ha gustado conectarme con la Naturaleza, pero esta vez sentí el llamado a hacer esta producción por el factor aventura, con ganas de enfrentar miedos, de salir de la costumbre. Con esta serie intento explorar lo que realmente necesitamos para vivir y sobrevivir. Esta ha sido mi oportunidad de vivir una aventura y espero inspirar a otros a hacer lo mismo, a vivir su propia aventura.
Roberto, El Altruista
Es embajador de los premios Latinoamérica Verde, que reconocen el trabajo de organizaciones y personas que trabajan en pro del medio ambiente. “La fama es una bendición que te permite estar al servicio de proyectos como éste, que tiene una gran responsabilidad ambiental en un momento en el que necesitamos cambiar como sociedad”. Roberto también es fundador de Desafío Ecuador, una organización creada para ayudar a las víctimas del terremoto que sacudió ese país el 2016. “El terremoto fue una experiencia dura.
Hice un trabajo en la zona donde sucedió y me dejó la bendición de crear mi fundación. Ahora que he visto el impacto directo en la vida de los niños para quienes construimos una escuela, y ver cómo el esfuerzo tiene un resultado inmediato en esta comunidad, me confirma que lo que más me llena en la vida es eso: Visualizo mi vida en un futuro mediano dedicado a hacer la diferencia, no me puedo negar a mi mismo que esto es lo que quiero hacer”.