De acuerdo con un informe presentado por el Center for Immigration Studies (CIS), la población inmigrante de Estados Unidos, incluyendo a los residentes legales y a los indocumentados, alcanzó un récord de 43.7 millones en 2016. Además, el informe del centro conservador señala que uno de cada ocho residentes es inmigrante, el más alto porcentaje de los últimos 106 años.

De 2010 a 2016, Estados Unidos recibió 8.1 millones de inmigrantes y alrededor de 300 mil se fueron del país, cada año, en ese periodo. Una cifra similar falleció. En el mismo periodo de tiempo, Texas recibió a 587,889 personas de origen inmigrante, incrementando su población extranjera en 14%.

México continúa siendo el país de origen con mayor número de residentes en el territorio estadounidense, aunque es notorio el incremento de inmigrantes procedentes de Centroamérica.