esto ayudará a que la convivencia sea armónica, equitativa y respetuosa. Pero qué sucede cuando la mujer es la que hace todo (trabaja, limpia la casa, cocina, cuida a los hijos) y el varón no mueve ni un dedo para ayudarla.

Esta situación se da por dos razones: La primera es cuando la mujer, en su afán de querer ser la ‘súper esposa’ y la ‘súper mamá’, no comparte funciones con su pareja y la acostumbra a no hacer nada.

La segunda es cuando el hombre es conformista (no tiene expectativas de progresar). Ambas condiciones van quebrantando la relación, ya que surgen las críticas negativas con mucha frecuencia.

Si tu pareja no te ayuda en nada, mujer, debes entender que el matrimonio es de dos, por lo que las actividades y quehaceres del hogar deben repartirse. Tienes que confiar y darle la oportunidad a tu pareja de demostrar su potencial.

Deja de lado las críticas y no esperes cambios inmediatos. Sé paciente y motiva a tu pareja a que te ayude. Si tu novio o esposo es conformista y siempre anda justificándose, habla con él, pregúntale qué lo detiene y por qué no pone empeño en sacar adelante a su familia. De inmediato dale responsabilidades y juntos plantéense metas para comprar una casa, guardar dinero para el estudio de los niños o un viaje familiar, pero con una fecha (para que no quede en palabras). Si después de esto no hay un cambio, deben acudir a un profesional para que los oriente.