Donald Trump propuso al Congreso de la Unión que cualquiera que pretenda reclamar el Crédito Tributario por Hijo (CTC), al momento de declarar sus impuestos, tiene que cumplir con dos únicos requisitos: poseer un número de Seguro Social válido y estar legalmente autorizado a trabajar en este país.

Esta medida tiene el objetivo de evitar que miles de indocumentados reciban este beneficio cada año; además de hacer que la inmigración ilegal sea menos atractiva. Este crédito fiscal se denomina ‘reembolsable’ porque las personas que no ganan lo suficiente para pagar impuestos todavía pueden obtener este necesario reembolso.

En la actualidad, todo lo que se requiere para reclamar esta devolución de impuestos es cumplir con los límites de ingresos y presentar una declaración de impuestos usando un Número de Identificación Personal del Contribuyente (ITIN), un documento creado en 1996 para los extranjeros que tenían que tratar con el IRS.

Desde entonces le ha permitido a las personas indocumentadas cumplir con el pago de impuestos, así como gozar de beneficios y créditos tributarios que brinda el Gobierno Federal. Según cifras compiladas por el IRS en 2014,

se estima que más de dos millones de familias pobres trabajadoras y cuatro millones de ciudadanos estadounidenses de todo el país se verán privados del acceso a este crédito tributario si la propuesta presidencial entra en vigor.