El fraude y la corrupción manchan el fútbol
Pedro Albundia | 6/1/2017, midnight
Son varios los jugadores y equipos de élite que intentan burlarse de la ley.
El 24 de mayo pasado, el Tribunal Supremo de Justicia de España convalidó la condena de 21 meses de prisión para Lionel Messi por delito de fraude fiscal de los derechos de imagen del futbolista durante los años 2007, 2008 y 2009. La noticia provocó decepción en una parte de la afición mundial, pero no es la primera vez que sucede algo así. El fraude y la corrupción ya han ensombrecido antes el balompié. Con el paso de los años, el deporte que une a los países, ha sido manchado por diferentes casos de fraude y corrupción por parte de jugadores, entrenadores y directivos.
El 2015, por ejemplo, la FIFA misma recibió un golpe muy duro cuando los conspicuos dirigentes Jeffrey Webb, Eduardo Li, Julio Rocha, Costas Takkas, Eugenio Figueredo, Rafael Esquivel y José María Marín fueron arrestados bajo cargos de corrupción, lavado de dinero y sobornos, acusados de amañar la elección de las sedes mundialistas de 2018 (Rusia) y 2022 (Qatar). Luego se entregaron directivos de CONCACAF y CONMEBOL, mientras que en casos más extremos algunos fueron extraditados desde sus países. El lector también recordará que la UEFA tuvo episodios delictivos, siendo la renuncia y posterior suspensión de por vida del otrora sensacional Michel Platini la cereza del postre.
Lo de Messi nos remite a otro proceso pendiente de resolución judicial, también en España y también dentro del Barcelona: el de Neymar Jr., y su supuesta millonaria defraudación tributaria cometida por su padre y la dirigencia del equipo al que siguen multitudes. Junto al brasileño, para quien piden dos años de prisión y una multa de poco más de diez millones de dólares, son procesados el actual presidente del club catalán y el ex presidente Sandro Rosell, quien tiene en sus antecedentes el haber sido detenido por el presunto blanqueo de 16.8 millones de dólares de derechos audiovisuales de la selección brasileña de fútbol.
Otro caso de corrupción reciente, que remeció el mundo, sucedió en Italia el 2006 y fue bautizado como el ‘Calciopoli’. El destape denunció a dirigentes deportivos acusados de pagar sobornos a los encargados de designar a los árbitros que pitaban partidos específicos de la Serie A, los cuales debían favorecer a sus equipos. ¿Cuáles fueron esos clubes y qué les pasó? El más perjudicado fue la Juventus de Turín, lanzada a la Serie B con 30 puntos menos (antes de competir en esa categoría); multados con poco más de 120 mil dólares y despojada de los scudettos de las temporadas 2004/2005 y 2005/2006. El AC Milán fue castigado con 15 puntos menos; la Fiorentina perdió la categoría y 30 puntos; la Lazio perdió 30 puntos; y el Reggina recibió una multa de 70 mil dólares.
Es reconfortante que, aunque jugadores y equipos de élite optan por corromperse y defraudar a los países en los que se desarrollan, la justicia sí les toca y les hace pagar, dándoles dónde más duele: el dinero.