Estás soltera aunque eres una mujer exitosa, guapa y simpática, y tienes una profesión, o un buen trabajo e incluso una empresa propia. ‘¿Por qué?’, te preguntan tus seres queridos. No hay nada malo contigo, diles. Se trataría de una sola cosa: falta de oferta para satisfacer la demanda.

La realidad es que, en el Centro de Texas y en todo el país, no hay suficientes hombres con estudios superiores que quieran a su lado a una mujer inteligente e independiente para una relación seria. Y esto se agrava cada año por el aumento de mujeres que sí terminan sus estudios.

En Estados Unidos, incluida Texas, la mayoría de mujeres profesionales no aceptaría a un hombre que no esté en sus mismas condiciones. Esto se debe a los prejuicios sociales y a las perspectivas económicas en relación a la formación de una familia. Y es que, como dice la canción: ‘no se puede vivir del amor’.

Mientras salgan menos egresados masculinos de las universidades estadounidenses y de los ‘community college’, las mujeres profesionales tendrán menos posibilidades de encontrar una pareja estable de su agrado. Y ninguna piensa en resignarse con poco, por más lindo que sea el varón sin profesión (y menos sin perspectivas financieras).

El detalle es que, ante la falta de caballeros con un nivel de educación superior, muchas mujeres (especialmente las jóvenes) han decidido practicar el ‘hook-up’, un encuentro íntimo casual con alguien que les guste físicamente, pero sin ningún tipo de compromiso al día siguiente. Sin embargo, esa práctica es negativa a mediano plazo ya que el método las hace sentir ‘vacías’ debido a la banalización del sexo a cambio de amor.

Depende de cada mujer elegir si finalmente se decide o no por el galán que le ronda la esquina. Aunque éste sea un hombre sin educación superior y sin panorama financiero.