Devaluación del peso mexicano golpea ciudades estadounidenses
1/12/2017, midnight
La economía de las ciudades fronterizas de Texas ha llegado a depender de compradores de México, que gastan un total combinado de 4,500 millones de dólares anuales y representan hasta el 45% de todas las ventas al por menor en ciudades como McAllen, Brownsville, Laredo y El Paso (según el Banco de la Reserva Federal de Dallas). Sin embargo, los ingresos de esa parte de la región está siendo amenazada.
Con el dólar fortalecido en los últimos años, el peso mexicano ha caído de 12 por dólar (a mediados de 2013), a más de 20 en la actualidad, reduciendo drásticamente el poder adquisitivo de los mexicanos. Las ventas al por menor en McAllen, que habían estado en una subida abrupta desde 2000 (a excepción de una caída durante la recesión del 2008) han caído un 5% desde mediados de 2014.
Eso podría empeorar si el presidente electo Donald Trump cumple con las promesas de erigir barreras físicas y económicas entre los dos países, que han disfrutado de un comercio casi sin restricciones a través de la frontera durante más de dos décadas. El peso sufrió su mayor caída en la noche de las elecciones presidenciales de noviembre pasado, ya que los mercados se preparan ahora para un gobierno dirigido por un hombre que amenazó el comercio con México.
Aunque el peso se ha recuperado ligeramente, la caída de su valor sigue siendo la mayor desde que el gobierno mexicano devaluó su moneda durante una crisis económica en 1994. Esta vez, si continúa la caída de dos años del peso, podría poner en peligro la integración que ayudó a impulsar el éxito comercial en las ciudades fronterizas de Texas. AGENCIAS.